El diario plural del Zulia

Isla Margarita, el rostro desolado de la crisis venezolana

La crisis ha empujado a las aerolíneas a reducir o cerrar operaciones. Porlamar, la antigua zona comercial luce como un pueblo fantasma

Agosto ha sido la temporada más deprimida en la isla de Margarita en mucho tiempo. La grave crisis económica ha dado un fuerte coletazo al principal destino turístico de Venezuela, el que era el paseo fijo de las familias en las vacaciones escolares.

En el último año solo han recibido la visita de 380 mil turistas, apenas un 10% del pico que tuvo en 2012. Hace apenas seis años, 3,2 millones de turistas visitaron una isla con poco menos de medio millón de pobladores y 20.000 camas de hotel.

La crisis ha empujado a las aerolíneas a reducir o cerrar operaciones por la imposibilidad de adquirir divisas para costear el funcionamiento, reseñó El País de España.

La reducción de las conexiones aéreas es una de las situaciones que más afecta a la isla. Colombia, Brasil y Trinidad son los puntos desde donde se puede llegar directamente y para el extranjero el tipo de cambio hace muy barato el viaje, pero son pocos los vuelos.

 

Escenarios

En Margarita hay otra isla, la de los emprendedores gastronómicos que han logrado devolver el golpe a la crisis. Oswaldo Páez es uno de ellos. Abrió Amaranto en Pampatar hace cinco años y este 2018 aún mantiene sus mesas llenas.

“Una semana tenemos cervezas, otra no. Es difícil trabajar así, pero nos la hemos ingeniado. El tema de la reconversión y la estampida de los muchachos del país es lo que más nos preocupa. En dos semanas se me fueron 5 personas, y conseguir gente con talento, tercos como nosotros, es difícil. Muchos viven del otro lado de la isla y hay que asegurarles el transporte, porque nadie quiere perder su salario en transporte. Aquí seguimos, pero todos los días pienso en cerrar”, cuenta Páez.

Llegar en barco es un suplicio. Conferry, la principal empresa naviera expropiada por el Gobierno hace siete años, solo tiene dos barcos operativos. El último mes dos enormes y oxidadas embarcaciones de la flota se hundieron con parsimonia en el muelle de la compañía como una trágica escena de la Venezuela de hoy.

"Es la temporada más deprimida que hemos tenido, la realidad es evidente. Si el 90% de los ingresos de los venezolanos se va en comida, quién va a estar haciendo turismo, pero el potencial que tenemos es enorme. Hace 12 años no teníamos infraestructura y teníamos los turistas, ahora tenemos la capacidad y no tenemos quien venga", dice Eduard Noguera, presidente de la Cámara de Comercio del Estado de Nueva Esparta, que afilia a ese sector en la isla.

La desolación se hace más evidente en el casco central de la isla. Porlamar, la antigua zona comercial luce como un pueblo fantasma.

Noguera señala que de 400.000 metros cuadrados de comercios que hay en toda la isla, apenas 30% está operativo. Gran parte de la debacle del centro de Margarita viene gestándose hace años. La construcción de grandes centros comerciales mudó la actividad a otras zonas, pero ero hoy esas moles quedaron fuera de escala ante la falta de visitantes.

"Hemos retrocedido como 60 años. Ahora vemos niños desnudos y comiendo en la basura", dice Ramón Luna, que tiene una fundación que reparte arepas a los niños más pobres de la isla.

El caos que ha generado el paquete económico del Gobierno ha agregado más incertidumbre en la isla. "En Nueva Esparta estamos convencidos de que podemos salir adelante, la noticia de esa posible libre convertibilidad de la moneda, si no tiene letras pequeñas, nos alienta. Eso permitiría reponer inventarios. Nos preocupa lo de los pasivos laborales con el nuevo aumento del salario, que para hoteles que tienen mucho personal es un duro golpe. Pese a todo estamos preparados para cuando esto pase", asegura Noguera.

Lea también
Comentarios
Cargando...