Esquema de distribución de agua 30 x 150 no se está cumpliendo

Llegó abril, mes esperado por todos los zulianos y el gabinete del Gobierno regional. La lluvia es lo más anhelado, sin embargo las que han caído o se prevén no son suficientes para que Manuelote, Tulé y Tres Ríos recuperen sus niveles normales.

Tres años de sequía, el fenómeno de “El Niño” y la gestión de la Hidrológica del Lago (Hidrolago), son los puntos que en la cotidianidad toca el zuliano. La crisis del vital líquido está llegando al punto más álgido, tanto así que el secretario general de Gobierno, Giovanny Villalobos, ha catalogado que la situación está “en alerta amarilla”.

Constantes visitas a los embalses y tres reajustes en el esquema de distribución de agua ha hecho el ministro de Ecosocialismo y Agua, Ernesto Paiva; pero las tuberías continúan secas y afectando cada vez más a la población.

Incumplimiento
“Aquí pasan 20 días sin llegar el agua, esto es inhumano, nosotros sabemos que es por la sequía, pero también necesitamos que vigilen el cobro excesivo de los camiones cisterna”, señala Antonia Andrade, habitante del barrio 23 de enero, ubicado en el sector Haticos.

Desde el pasado 1° de abril entró en vigencia el nuevo esquema de distribución. Paiva, el gobernador del estado Zulia, Francisco Arias Cárdenas; y Freddy Rodríguez, presidente de Hidrolago, anunciaron que el esquema sería de 30 horas de servicio por 150 horas de ausencia en los municipios Maracaibo, San Francisco, Mara, Miranda, Jesús Enrique Lossada y Almirante Padilla.

Hace una semana los embalses contaban con 46 millones de metros cúbicos, que cubre el servicio de casi dos millones 600 mil personas. Demanda que no es cumplida a cabalidad, según reportan las comunidades.

En el sector El Gaitero, del municipio San Francisco, también esperan hasta 15 días por la llegada del vital líquido. Franklin Valbuena, manifestó que cuando llega el servicio dura apenas dos o tres horas. “Nos levantamos en la madrugada varias veces, pero no llega y cuando llega, los vecinos encienden las bombas y tengo que esperar que ellos llenen sus tanques, para poder abastecerme”.

Asimismo, sectores como Ciudad Lossada, Los Olivos, La Rotaria, Los Modines, La Pomona, La Alambra, Primero de Mayo, Fuerzas Armadas presentan en su mayoría escasez. Las familias han optado por lavar los platos y darle bomba al baño con el agua de los aires acondicionados, e incluso bañarse y en medidas extremas orinan más de tres veces en un mismo sanitario para ahorrar.

Cotas altas
Durante una actividad con los miembros comunitarios pertenecientes a los “Guardianes del agua”, Genry Delgado, líder de desarrollo social de Hidrolago, manifestó que se está trabajando arduamente para establecer la conciencia en los ciudadanos. “Sobre todo de aquellos a los que les llega el agua en abundancia y la mal utilizan, por eso estamos dando charlas sobre cómo está la situación del agua en el mundo y en Venezuela, para despertar conciencia”.

Señaló que hay partes donde no se cumple el esquema en su totalidad, debido a que ya los niveles de los embalses no permiten un bombeo efectivo, sobre todo en las cotas más altas de los municipios, es decir en las zonas más altas.

Delgado argumentó que también existen lo que llaman “la guerra de bombas”, que sucede cuando llega el vital líquido y todo el mundo en una comunidad específica encienden la máquina hidráulica para poder surtirse, dejando a otros sin el servicio.

Esquema teórico
Por su parte, Giovanny Villalobos manifestó que el esquema muchas veces en cuestión de práctica no se da, “es algo más bien teórico, porque están muy bajos los niveles y cuando se despresuriza, volver a tomar la presión en las tuberías, lleva tiempo”.

Indicó que por el momento continúan trabajando con la Sala Situacional colocando los camiones cisterna a disposición del pueblo, con mayor énfasis en los hospitales, escuelas e incluso abastecen casas de cuidado para las personas de la tercera edad.

El secretario de Gobierno puntualizó que el decreto que controlará el uso de agua en los autolavados ya está listo, pero no ha sido publicado porque están estudiando la posibilidad de no afectar negativamente a los trabajadores y sus familias.