En nueve días fallecieron dos pacientes renales trasplantadas
Luz Marina Martínez, de 40 años, falleció durante la madrugada del martes debido a la escasez de inmunosupresores. Desde hace dos meses y medio la madre de dos niños -de 11 y 13 años- no ingería las medicinas para evitar que su organismo rechazara el trasplante de riñón que recibió hace cinco años.
Su esposo Rafael Funes denunció que la carencia de fármacos desmejoró la calidad de vida de la mujer, oriunda de San Juan de Los Morros, estado Guárico, a través de un video publicado en la red social Twitter por la Coalición de Organizaciones por el Derecho a la Salud y a la Vida (Codevida).
En tan solo nueve días, dos pacientes trasplantadas murieron por la falta de medicamentos en Caracas. La vida de Marta Solórzano, de 50 años, también se extinguió el pasado 4 de marzo, un día después de solicitar ayuda para encontrar su tratamiento médico.
Marta perdió su trasplante porque desde diciembre no consumía myfortic y rapamune. Fue sometida a diálisis hasta la fecha de su deceso.
La escasez de los medicamentos se agudizó en el 2016, según denunciaban diversas organizaciones no gubernamentales. Codevida y la Fundación Amigos Trasplantados de Venezuela contabilizaron 30 rechazos de órgano hasta el pasado 5 de marzo, por falta de inmunosupresores.
