El zika no es causa para la interrupción del embarazo

Las alarmas han sido encendidas en Venezuela, luego de la aparición del zika. Sin cifras y sin campaña de prevención los venezolanos se sienten desinformados, pero las implicaciones parecen ir más allá. En países como Brasil y Colombia existe un alto porcentaje de mujeres embarazadas que presentaron la enfermedad y sus bebés nacieron con microcefalia (desarrollo insuficiente del cráneo) e incluso algunos neonatos han fallecido luego de su nacimiento.
En noviembre del 2015 el Ministerio de Salud brasileño decretó estado de emergencia sanitaria por casos de microcefalia, destacaron a través del diario El Mundo, de España, que desde el mes de julio hasta el onceavo mes del año fueron notificados 399 casos de desarrollo insuficiente del cráneo, en siete estados del noreste del país, luego que las gestantes presentaran los síntomas del zika.
Colombia también se ha mantenido expectante respecto a los casos con un universo de 11 mil personas infectadas, entre ellas 459 mujeres embarazadas y 101 casos sospechosos según un informe del estatal Instituto Nacional de Salud (INS).
Interrupción o ética
La pregunta más frecuente en personas que atraviesan o no por este tipo de situación, se establece entre interrumpir el embarazo o traer al mundo a un bebé con malformaciones.
Para la doctora Dianela Parra, presidente del Colegio de Médicos del Estado Zulia, el hecho va a depender de la voluntad de los padres, sin embargo recuerda que desde el punto de vista cristiano-católico “la iglesia y la mayoría de los médicos no concebimos la interrupción del embarazo por ningún tipo de patología fetal, porque hoy en día hay muchos procedimientos para poder ayudar a insertar a la sociedad a las personas que puedan nacer con discapacidad”, aseguró.
Asimismo, el profesor de ética de la Facultad de Medicina de la Universidad del Zulia, Fernando Guzmán, argumentó que en la actualidad hay muchos procedimientos que se pueden hacer para evaluar el embarazo y las manifestaciones del virus, pero aseveró que la única causa para interrumpir el embarazo en Venezuela, es que esté en riesgo la salud de la madre.
“En Venezuela no está permitido legalmente la interrupción del embarazo por malformaciones del feto y el médico que así lo contemplara puede meterse en un problema jurídico bastante serio”, explicó.
No es científico
La microcefalia en el feto no es una consecuencia científicamente comprobada por la aparición del zika en los primeros meses de gestación porque no se ha conocido cómo el virus puede atravesar la barrera placentaria y conllevar a la anomalía en el encéfalo del bebé, según Parra.
“No hay una evidencia científica que nos permita confirmar que si una mujer embarazada sufre de zika, su feto va a estar alterado; se ha visto es relación entre mujeres que han tenido la enfermedad y las malformaciones en el bebé, pero no deben alarmarse por ello, porque además la microcefalia no lleva a un óbito, es decir el bebé no se va a morir dentro de la barriga”, planteó la especialista en neurología.
Las autoridades nacionales y regionales no han publicado cifras al respecto por lo que la diputada suplente y titular del gremio de médicos en el Zulia, Dianela Parra, denuncia que existe un grave problema de información, sobre todo en lo que refiere a la publicación del boletín epidemiológico “que debe ser de circulación semanal para tener esos detalles”.
Manifestó que el Colegio de Médicos de la región está solicitando decretar una emergencia en el sector salud “para que se agilicen los insumos porque hay 100% de desabastecimiento en hospitales y no vemos ninguna salvedad del Presidente durante su memoria y cuenta”, sentenció.
El pasado 13 de enero la secretaria de Salud del estado Zulia, Tania Mesa, sostuvo en rueda de prensa que no hay registros exactos de pacientes infectados con el zika debido a que las personas no acuden al médico en las 72 horas establecidas para que pueda brindarse un diagnóstico sobre la enfermedad.