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El bolívar comenzó de nuevo a cotizarse en la frontera colombiana

El poco consenso en torno a la cotización del bolívar en La Parada da la sensación de que cada operador la estipula de acuerdo con su percepción, sin que haya algún parámetro que los rija al momento de fijar el precio para la compra

Los bolívares retornaron a las casas de cambio de La Parada, en Colombia. Algunos de estos establecimientos ya empezaron a exhibir los letreros en sus fachadas con la frase: “compramos bolívares nuevos”.

En otros puntos solo escriben la palabra "bolívares" y el precio para la compra, mientras también están los que reciben los bolívares sin tener algún tipo de anuncio o frase en la entrada al negocio, reseñó La Nación.

Por varios meses, el corregimiento neogranadino dejó de cotizar los bolívares. En los letreros solo se divisaban las palabras dólares y euros, monedas que también suelen manejar los venezolanos que arriban a la zona.

En un recorrido que hizo el equipo reporteril de La Nación por los diversos establecimientos cambiarios de la localidad, se pudo observar que el precio establecido para la compra de los bolívares varía en cada establecimiento.

“Los compramos a 600”, dijo la encargada de un punto en La Parada. “Los estamos recibiendo en 500”, soltaron

En otra casa de cambio. En una tercera consulta, el precio varió notablemente: “compramos bolívares en 300”, acotó.

De acuerdo con La Nación, el poco consenso en torno a la cotización del bolívar en La Parada da la sensación de que cada operador la estipula de acuerdo con su percepción, sin que haya algún parámetro que los rija al momento de fijar el precio para la compra.

Donde no se registran variaciones es en el precio para la venta. En casi todos los establecimientos se cotizaba en 1.000 al momento de la consulta realizada en el sector comercial neogranadino.

“Prefiero traer mis dólares”

Juana Novoa, de 55 años, es consciente de que en La Parada reciben los bolívares; sin embargo, la dama prefiere viajar con sus dólares, pues al momento de cambiarlos en La Parada quizá no puede conseguir un buen precio.

“Me he percatado que los bolívares los reciben como ellos quieren. No hay un precio fijo”, manifestó la quincuagenaria, proveniente de la ciudad de Maracay, Aragua.

Novoa tiene a sus dos hijas viviendo en Cúcuta, en el departamento de Norte de Santander, razón por la que suele viajar frecuentemente desde Maracay hasta la ciudad neogranadina.

Dólar y euro

Mientras el bolívar vuelve a cobrar presencia en las casas de cambio de la zona, el dólar y el euro se mantienen como las divisas que más circulan en los puntos colombianos.

La mayoría de establecimientos coinciden, tanto en el precio que fijan para la venta, como para la compra de ambas divisas. Los letreros que muestran en sus fachadas lo certifican a diario, informó La Nación.

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