Denuncia que lo discriminan en su trabajo en el Palacio de Justicia

Domingo Antonio Léidenz, de 54 años, es un ciudadano que tiene una discapacidad. Hace alrededor de 20 años, en 2002, sufrió un accidente en Enelven (hoy Corpoelec), ubicada en Amparo. Recibió una fuerte descarga eléctrica por una cajera de transformadores de piso que, denunció, estaba abierta, sin ninguna señal de prevención peatonal.

Léidenz trabajaba en ese momento como montacarguista. A raíz del accidente, perdió los miembros inferiores. Ha estado solicitando prótesis a Corpoelec, pues considera que esa empresa es la responsable de que le amputaran las piernas. Sin embargo, aún aguarda por respuesta.

El no tener piernas no le impidió trabajar en la Alcaldía de Maracaibo. Este señor aseguró a Versión Final, vía telefónica, que por una discusión con un sindicalista, debió renunciar.

Léidenz ha sido persistente. Al punto que, contó, en 2014 habló con el entonces presidente de Corpoelec, Argenis Chávez Frías, a quien le planteó su problema.

Según el declarante, Chávez le dijo que lo iba a indemnizar y a otorgarle lo que fuera necesario para su recuperación.

Eso me lo dijo verbal, no fue nada por escrito, fue en Torre Mara, avenida El Milagro", afirmó Léidenz.

Ese año 2014 logró ingresar a la Dirección Administrativa Regional de la Dirección Ejecutiva de la Magistratura (DEM), dependiente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ). Su lugar de trabajo está en el Palacio de Justicia, en el Casco Central.

Por presentar mi discapacidad, por haber sufrido la amputación de dos miembros inferiores y por mi reiterada solicitud de las prótesis, he recibido mucha discriminación y humillación por parte de mis jefes", asegura Léidenz, quien dice que se desempeña como técnico III, pero en la actualidad lo tienen solo cumpliendo horario, sin desempeñar tarea alguna.

También acusó a otro empleado de los tribunales, quien al parecer llegó a trabajar en Corpoelec, de vulnerarle el derecho a seguir denunciando "el daño irreparable que me ocasionó la cajera de transformadores de piso, propiedad de Enelven".

Apunta que él gozaba de un fideicomiso que mensualmente cobraba de Corpoelec, pero "sin notificación alguna", le retiraron ese beneficio.

Domingo Léidenz señaló que estuvo en conversaciones con las autoridades de Corpoelec en el Zulia, y añadió que el gerente regional de la empresa, Napoleón Rivero, "tiene mucha sensibilidad humana".

El ciudadano refirió que será atendido en Corpoelec la próxima semana, según le indicaron, para consignar el presupuesto y una carta explicativa sobre la solicitud de sus prótesis.

Léidenz solicita además una silla de ruedas, mientras se concreta la gestión de las prótesis.

Y exhorta a sus jefes en la DEM para que lo pongan a trabajar como técnico III que es, que no lo discriminen.