El diario plural del Zulia

Cráteres, cloacas e indolencia acaban con calles de La Rotaria

Alcaldía de Maracaibo ignora el mal estado vial del populoso sector del oeste

Transitar por las calles del sector La Rotaria, en la parroquia Raúl Leoni de Maracaibo, es un calvario que vecinos y visitantes padecen desde hace más de tres años. Los residentes viven entre malos olores y enfermedades; el bote de aguas negras es el protagonista de varias calles de la concurrida zona al oeste de la ciudad.

Cientos de moscas, escabiosis, tos, dolores de cabeza y hasta enfermedades respiratorias son las consecuencias que ha traído la falta de mantenimiento a los colectores. De las tanquillas brota el putrefacto líquido, que también revienta por los sumideros de las viviendas cercanas.

Los patios de las casas se inundan de agua de porquería. Los baños se rebosan porque todo el sistema de aguas negras está colapsado. No aguantamos ese olor, tenemos que vivir todos los días con esto. Tanta es la ineficiencia de los servicios en este país que llevamos tres años rogándole al Gobierno para que nos atienda, denunció a Versión Final Marlene Socorro, residente de la primera etapa de La Rotaria.

A pesar del tiempo, es imposible para los vecinos del sector acostumbrarse a coexistir con la inmundicia. Las vistosas casas de la comunidad son opacadas por el insoportable olor del agua que inunda las calles.

¿Cómo hacemos para sentarnos en el frente de nuestros hogares a conversar como lo hace la gente normal? No podemos. Siempre debemos mantener las puertas y ventanas cerradas porque es insoportable este mal olor. Los niños no pueden ni salir a jugar, ni podemos salir a caminar por las calles, comentó Ana Romero, residente de la comunidad.

Ante la falta de repuesta de los organismos correspondientes, los marabinos tomaron acciones por ellos mismos. Aparte de los árboles silvestres que han nacido en medio de los colectores, usaron un montón de basura y troncos para tapar las alcantarillas rotas por el mismo problema.

"Corremos peligro porque los conductores, para evitar los huecos y las aguas negras, se montan con sus carros en la acera. Va a llegar un momento en el que vamos a quedar incomunicados. Ninguna persona ni ningún vehículo podrá transitar por estas calles llena de cráteres que se han abierto por el agua estancada", refirió Ángel Alvadaro, también habitante de La Rotaria.

El señor dijo explicó que en las horas más calientes del día el olor es más insoportable. "Si uno mira el colector a medio día, esa agua negra hierve como un caldo negro. Esto ya es un tema de salud pública que debe ser atendido", indicó.

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