Confieren el Doctorado Honoris Causa a cuatro médicos egresados de LUZ
“Quisiera iniciar mis palabras con una admisión. Se trata casi de una confesión. Nuestra casa de estudios, en alguna que otra oportunidad, ha corrido el riesgo de rendirse ante la inercia y la rutina”, así iniciaba el rector de la Universidad del Zulia (LUZ), Jorge Palencia, el acto.
Se trata del conferimiento Doctor Honoris Causa de la Facultad de Medicina de LUZ a cuatro galenos egresados de la alma máter zuliana, docentes y especialistas de dilatada trayectoria con proyección internacional y fundadores de grandes proyectos en la región.
“Culpemos a la crisis, culpemos a la conflictividad o a lo que mejor nos parezca, pero los desasosiegos individuales, e incluso las preocupaciones institucionales, a veces conspiran para minimizar el impacto y la atención debida que cada acto merece. Y el de hoy no es un acto cualquiera”, proseguía Palencia desde el auditorio “Dr. Luis Guillermo Moreno Guerra”, ubicado en la Casa del Profesor Universitario.
En primera la los homenajeados. Con toga y birrete, seguramente pensando en todo que han alcanzado, escuchaban las palabras del rector. Hazel Anderson, Maribel Lizarzabal, Dilmo Hinestroza y Nelson Socorro fueron llamados al escenario, luego de haber sido expuestas las razones por las cuales el Consejo Universitario decidió otorgarles el distinguido reconocimiento.
Hinestroza fue el encargado de dirigir las palabras de agradecimiento a las autoridades rectorales en nombre de sus compañeros. “Honramos en este acto a nuestros antecesores que han dejado un legado patrimonial que ha enriquecido el accionar de nuestra institución como académicos, especialmente en la misión de formar con fundamentos científicos a los profesionales de las diferentes áreas del conocimiento”.
Habló del derecho pleno a la educación integral y permanente, con equidad de género e igualdad de condiciones, oportunidades, derechos y deberes. Dijo que la autonomía es reconocida por el estado para el ejercicio de la libertad intelectual y la investigación para la formación científica y cultural.
Mientras tanto, la voz del rector Palencia desde el principio retumbó hasta el final en la memoria de los presentes porque interpretó este galardón “como una bocanada de aire fresco, como un faro que refulge brillante en pleno riesgo del naufragio. Soy un convencido de que el buen ejemplo es capaz de empoderar a miles” y ellos son ejemplo el.
