Avenidas principales son el nuevo vertedero de Maracaibo
Desde hace varios meses, Mary Castellano, de 18 años, observa como las calles y avenidas principales de Maracaibo albergan incalculables cantidades de basura: ramas, troncos, restos de puertas, aparatos electrónicos e incluso animales muertos.
Caminar entre los desechos sólidos genera gran malestar y angustia en la estudiante de Bionálisis. Sus padres y maestros le enseñaron que los desechos sólidos debe ser depositados en los contenedores o dispuestos en las bolsas negras selladas.
Debe transitar por la acera de la avenida 100, Sabaneta, porque es la única manera de llegar a la estación Urdaneta; para luego, trasladarse en el Metro al Centro de la capital zuliana, donde los transeúntes y comerciantes también lanzan sus desperdicios.
A su juicio, las fallas en la recolección de basura y la falta de valores en los marabinos, son dos factores que incidieron en la acumulación de desechos en la ciudad.
“El problema se salió de control porque el Instituto Municipal de Aseo Urbano (IMAU) dejó de recoger la basura. Las autoridades competentes como la Sanidad deben pronunciarse porque esta situación puede desatar enfermedades en la población”, expresó.
En la avenida La Limpia, la Circunvalación 1, 2 y 3 permanecen los desechos sólidos que cada día abarrotan las aceras
A tan solo nueve días para iniciar el Año Nuevo, la inmundicia abunda en cada esquina. En declaraciones anteriores, el director regional de Salud Ambiental, Pedro Morell, señaló que la presencia descontrolada de basura, en espacios destinados para la recreación y convivencia ciudadana, puede ocasionar complicaciones respiratorias o incrementar los casos de dengue, zika o chikungunya en la entidad.
Incineración de basura
El incremento de desechos en urbanizaciones, barrios y avenidas detonó un nuevo escenario: la quema constante de basura.
En diversas oportunidades, las comunidades y vecinos, han planteado al equipo reporteril de Versión Final que queman la montaña de desperdicios para evitar el mal olor y la proliferación de moscas e insectos en los alrededores de sus hogares; elevando los riesgos de padecer afecciones del sistema respiratorio.
