Así fue la Coronación de la Chinita en el año 1942
Se vivían tiempos de conflictos, en plena Segunda Guerra Mundial los países tenían temor de algún ataque enemigo, fue en este contexto que la reliquia de la Virgen del Rosario de Chiquinquirá fue coronada hace ocho décadas en el Zulia, un 18 de noviembre de 1942.
El 12 de octubre del mismo año, había sido consagrada la nueva Basílica en su honor con las modificaciones más modernas para entonces y en aquel tiempo ya Monseñor Olegario Villalobos, párroco de la Catedral de Maracaibo, había hecho diligencias para conseguir del papa Benedicto XV la Coronación Canónica de la Chinita.
Mientras tanto en la clausura del tercer Congreso Mariano Nacional se celebra con toda dignidad la Coronación Canónica de Nuestra Señora de Chiquinquirá, dicha ceremonia fue presidida por el Nuncio Apostólico en Venezuela, monseñor José Misuraca, acompañado del Obispo del Zulia, monseñor Marcos Sergio Godoy.
En este acto estuvo presente el presidente del país para entonces, general Isaías Medina Angarita, quien participó cordialmente, aceptando la invitación del comité de coronación.
Uno de los espacios que se adecuó fue el campo de coronación, construido en La Ciega y donde asistió una gran cantidad de marabinos y visitantes de otros estados para presenciar el acto litúrgico de la entrega de la joya que había sido confeccionada meses antes por el orfebre Alberto Bishoff, de origen alemán, quien trabajó una pieza de 10 kilos de oro y piedras preciosas, donadas en su totalidad por los feligreses.
Al final de la homilía el Nuncio tomó en sus manos la corona, la bendijo con la fórmula de la liturgia mariana y alzándola sobre la cabeza de la Virgen pronunció; "Así como eres coronada por nosotros en la tierra, así esperamos ser coronados de gloria por tu Hijo en el Cielo", acto seguido volaron palomas pintadas con los colores de la bandera nacional.
Ya coronada la Chinita, fue entonado por primera vez el himno "Gloria a ti, Casta Señora", letra original de la poetisa y diplomática Graciela Rincón Calcaño y música del compositor y pianista Adolfo de Pool Rodenas, que ganó su puesto en un concurso denominado "Himno Nativista a Nuestra Señora de Chiquinquirá", donde participaron unas 24 canciones.
