Paciencia: La clave del éxito para triunfar en el futuro

“Por un momento decidí irme del país, porque no soportaba la situación actual, pero me di cuenta (de) que vale la pena ser paciente y esperar. Estoy convencida de que mejores cosas están por venir para cada uno de nosotros”, así lo aseguró Darianny Fuenmayor con lágrimas en los ojos y una radiante sonrisa en su cara.

Fuenmayor inscribió su último semestre de Comunicación Social en la Universidad Católica Cecilio Acosta (Unica), pero las decisiones que ha tomado no han sido “nada fáciles”. Sin embargo, los valores inculcados por su familia la llenan de fortaleza para continuar su rumbo al éxito sin detenerse.

“La situación actual del país desanima a casi todos los estudiantes. Nunca pensé que iba a necesitar de tanta paciencia para lograr mi gran sueño: vestir de toga y birrete, para dedicarle el triunfo a mis padres, además de sentirme bien conmigo misma”, manifestó con una mirada fija hacia el horizonte, donde proyectó por un instante todas sus metas cumplidas.

Fuenmayor decidió emigrar hacia Colombia. Despedirse de sus seres queridos, y aunque fue una de las tareas más difíciles de su vida, sus sueños siguen intactos; ella tiene fe y certeza de que pronto Venezuela podrá convertirse en el paraíso que muchos anhelan, donde todos podrán convivir de forma armoniosa.

El psicólogo Jeison Hernández considera que la paciencia es un valor que refleja la habilidad o destreza que tiene una persona para tolerar situaciones desfavorables ante las cuales no se tendría control alguno, como la pérdida de un ser querido.

“Esta virtud permite alcanzar resultados más coherentes, planificados y efectivos. Por ende es aplicable a cualquier circunstancia, siempre y cuando exista el deseo de cambiar lo negativo por lo positivo”, señaló el especialista.

La paciencia es un hábito que ayuda a las personas a bajar las tensiones de los problemas encontrados en la vida cotidiana. La mejor forma de obtenerla es viéndola como el camino hacia el aprendizaje y con deseos de superación personal, para así mantener el control en situaciones difíciles.

Hernández explicó que si la sociedad fuera más paciente, el beneficio sería general y los problemas o malas energías se podrían disminuir, mejorando de esta forma la calidad de vida de todas las personas.

Siempre positivos

Degnis Rivas, también estudiante de Comunicación Social en la Unica, argumentó que su mayor sueño es irse del país, pero su condición primordial es finalizar la carrera universitaria, porque “Venezuela va a cambiar, y cuando eso pase va a necesitar de nosotros los jóvenes para construir un mejor futuro”.

Rivas detalló que su manera de obtener la paciencia es respirar profundamente y olvidar por un instante sus problemas, situación que “no es nada fácil, pero tampoco imposible, porque deseo superar las adversidades y luchar por alcanzar mis metas”.

Karla Perdomo, compañera de clases de Rivas, precisó que ante las barreras u obstáculos es necesario actuar con sabiduría para seguir hacia adelante y demostrar que la paciencia tiene la capacidad suficiente de superar todas las adversidades presentadas en el camino.

“Yo siempre busco la solución y trato de darle la vuelta a los problemas, todo se debe a las ganas de obtener mi título. Nosotros los estudiantes estamos pasando por una situación difícil, pero las ganas de cumplir nuestro sueño son más grandes”, reiteró.

A criterio de ambos, los estudiantes, jóvenes y adultos podrían ser más pacientes y de esta forma se contribuiría a la obtención de una sociedad más serena y positiva.

Motivación

María Olivares, orientadora y docente de pregrado, subrayó que los universitarios necesitan una mano amiga para reforzar las virtudes y los valores de cada uno mediante talleres o foros motivacionales para que piensen en un bienestar llenos de serenidad y paciencia.

“Es cierto que estamos rodeados de noticias negativas, pero no todo en la vida tiene que ser triste o lamentable. Los padres debemos ayudar a nuestros hijos a buscar la alegría, porque de la armonía y la tranquilidad nace la felicidad”, sostuvo.

Olivares invita a todos los alumnos de las diferentes carreras universitarias ofrecidas en el país a tener paciencia y a saber aprovechar el momento, a darle un cambio significativo a las malas energías, “nosotros los venezolanos somos caracterizados por marcar la pauta y la alegría; no permitamos que un mal momento nos arruine el día”.

“La sociedad debe tener presente que no podemos ser negativos ante las circunstancias, es momento de respirar y calmarnos por un segundo, sonreír a la vida y demostrar que los venezolanos somos capaces de superar las adversidades”, añadió.

¿Es posible tener paciencia ante tantos problemas? Darianny Fuenmayor regresó a Venezuela después de durar más de tres meses en el exterior y explicó que en Colombia tenía una buena oportunidad económica, pero es venezolana y se siente orgullosa de serlo, “por eso retorné con una meta: Graduarme y demostrarle al mundo que sí es posible sonreír y salir adelante ante cualquier problema”.

Fuenmayor retomó su último semestre de Comunicación Social y se encuentra realizando sus pasantías. Llena de paciencia, perseverancia y optimismo, comparte su ejemplo para que la sociedad comprenda que: “Si tenemos mil adversidades, debemos demostrarle al mundo que nosotros tenemos mil y un soluciones para afrontarlas y seguir hasta conseguir nuestro éxito, sin que nada nos detenga”.