Guaco desborda el Palacio de Eventos con su “Ofrenda de Amor” a La Chinita
“Vivimos de tus encantos y de una fe muy bonita, por eso es que yo te canto todos los años, chinita”. Al ritmo de la Súper Banda de Venezuela, Guaco, más de tres mil personas regalaron su “Ofrenda de Amor” a nuestra Virgen María del Rosario de Chiquinquirá anoche en el Palacio de Eventos.
La reconocida agrupación venezolana conmovió a los seguidores marianos con la serenata a la “Virgen Guaquera”, quien deslumbró rodeada de devoción, cánticos y aplausos en el escenario del Gran Salón Venezuela.
A casa llena recibió su homenaje la virgen morena, donde el 100 % de las 3580 entradas vendidas serán destinadas como fondos para el autofinanciamiento de las fiestas patronales, organizadas por la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá.
“Gracias por atender esta invitación que les hicimos a todos ustedes para que con su entrada ayudáramos a recaudar fondos para las fiestas de nuestra Chinita”, dijo Luis Fernando Borjas, integrante de la Súper Banda, a todos los testigos de la Ofrenda de Amor.
Además de la serenata dedicada a la patrona zuliana, Guaco le obsequió un manto bordado con el logo de la agrupación y la frase de “soy una china guaquera” con un colorido diseño.
Entre los temas que le regalaron a la China destacaron Si me das, Llenarte de Amores y Lágrimas no más de su más reciente producción discográfica Bidimensional.
Tampoco hizo falta el popurrí de las canciones más exitosas durante su larga trayectoria, como Pa' ti, Vivo, Quiero decirte, Castígala, Si mis paredes hablaran y Como es tan bella.
Entre coros y bailes, los invitados a la fiesta por la Chinita también disfrutaron de las voces de Luis Fernando Borjas, Mark Meléndez y Diego Rojas fusionadas en movidos duetos musicales con La Melodía Perfecta, Juan Miguel y Annybel.
Oraciones hechas gaitas
En el primer evento que dio inicio a las fiestas patronales de la Virgen se reunieron quienes por más de veinte años han recitado oraciones hechas gaitas a la madre María, Los Chiquinquireños.
Íconos de la gaita zuliana de la talla de Ricardo Cepeda, Argenis Sánchez, Alexander Aguirre, Alfonso Marín, Carlos Martínez y Roberto Cubillán unieron sus voces para entonar sus himnos por primera vez en un escenario distinto a la plazoleta de la Basílica.
Los cantantes de la China pidieron al público que encendieran las linternas de sus celulares para decirle “Ay, mi Chinita vos sois mi ternura, mi reina del alma. Tu rostro es dulzura, que me da la calma, mi reina del alma”, en medio de un corillo de fieles seguidores.
Los Chiquinquireños fueron homenajeados por sus dos décadas de serenatas a la patrona con una corona musical de Nuestra Señora del Chiquinquirá. Así como también se les obsequió un video con mensajes de los más reconocidos miembros de la agrupación como Nëguito Borjas, Betulio Medina y Nelson Romero, El Ayayero, entre otros.
Invitados especiales
Los hermanos Gabo y Gio, de La Melodía Perfecta, también le trajeron su ofrenda a la Virgen Morena, con su debut en el Palacio de los Eventos de Maracaibo.
Trasladaron de Caracas hasta Maracaibo su galardón obtenido en los Premios Pepsi 2018 y ofrendaron las camisetas con las que se presentaron a la Chinita.
Gabo y Gio movieron al público marabino con sus temas emblemáticos como Juntos, Sobrenatural y Te lo tengo que decir, además de la colaboración de Juan Miguel.
El niño salsero Juanfer también causó sensaciones con su interpretación en el escenario, donde con un estilo único el cantante de tan corta edad recitó hasta El Alma Llanera.
La velada contó con la animación de Elianta Quintero y Carmen Elena Arrieta, quienes aseguraron que la organización de la Basílica contó con más de 400 funcionarios de seguridad y el apoyo del cuerpo bomberil de Maracaibo y la cruz roja para garantizar el control del acontecimiento musical.
Con un emotivo “¡Bendición, Chinita!” los marabinos, acompañados de Monseñor Ubaldo Santana y el Arzobispo José Luis Azuaje, iniciaron con mucha fe un nuevo año de fiestas en conmemoración a la llegada de la madre de los zulianos a Maracaibo.
