El diario plural del Zulia

“Se le fue la vida en manos de un irresponsable”

El menor que le disparó accidentalmente está detenido. Familiares exigen justicia.

Más de 100 personas caminaron unas 10 cuadras para llevar hasta su última morada a Johana Carolina Serna Pérez, de 16 años, quien murió al recibir un disparo en el cuello, de manera accidental, la noche del jueves.

“Se le fue la vida en manos de un irresponsable”, decían los que acompañaban el cortejo fúnebre que partió a pie desde su casa hasta el cementerio Corazón de Jesús en la avenida La Limpia.

Más de uno dijo que no era la primera vez que en la vivienda donde ocurrió la tragedia se habían escuchado disparos. “Ese muchacho manipulaba armas, con consentimiento de su padre, es una irresponsabilidad si lo sueltan”, decían los acompañantes del cortejo que prefirieron mantenerse en el anonimato.

Dijeron que la versión que sostiene el detenido y su familia no es así. “El parece que estaba manipulando el arma y se le fue el tiro. Quieren que se crea otra cosa”, decían.

La familia del menor de edad implicado, desde la noche del hecho, partieron de la casa y no se sabe dónde están, dijeron los allegados de la muchacha que recibió el disparo cuando llegaba a una casa situada en la avenida 38 del barrio Puerto Rico III, parroquia Cacique Mara.

La familia y vecinos la lloraron. Todos lamentaban su inesperada partida. Johana fue recordada como una muchacha muy querida y especial. Decidida a tener un futuro brillante que se vio truncado por una muerte nefasta.

El sueño de la menor era ser funcionaria del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) para ello ya se había empezado a preparar haciendo cursos de criminalística.

La familia de la joven espera que el implicado no salga bajo un beneficio por ser menor de edad. Pues aseguran que no era la primera vez que portaba el arma y apuntaba a alguien con ella.

Un disparo de escopeta

Según la primera versión, el joven de 15 años accionó el arma creyendo que eran delincuentes los que llegaban a su casa.

El jovencito tomó el arma de su padre y enseguida apuntó sin pensarlo. Y en un aparente descuido se le fue un disparo que impactó el cuello de la adolescente. Hipótesis que aún no está clara para los dolientes de Serna.

La muchacha llegó herida al Servicio Autónomo Hospital Universitario de Maracaibo (Sahum) dónde los médicos de guardia no pudieron salvarle la vida por la gravedad de la herida.

Lea también
Comentarios
Cargando...