“Maté a Ángel Bozo porque no me pagaba”
Con una actitud de arrepentimiento, nerviosa y con palabras a medio salir, Miguel Ángel Zambrano Marín confesó el motivo que lo llevó a planear y a ejecutar el homicidio de su jefe Ángel Ramón Bozo, de 65 años, ocurrido el pasado 27 de abril.
El plan era despojarlo de su Renault Symbol para venderlo en partes y así conseguir algo de dinero, pero tres días antes de efectuar el crimen decidió matar al que era su jefe desde hacia más de un año.
“Ese día, cuando terminamos de trabajar y me fue a llevar a mi casa, le dije que pasáramos recogiendo por la Circunvalación 2 a dos mecánicos que me ayudarían a reparar la camioneta en la que trabajaba trasladando materiales de construcción”, reveló el autor del crimen.
Trascendió que a la altura de la bomba El Turf, Zambrano le pidió a su jefe que se detuviera para buscar su celular, el que aparentemente no conseguía. En ese momento se montaron sus compinches, identificados como Pedro Luis Vera Lista, alias “El Negro” y Jhonmer Jhoel Ochoa Fuenmayor, ambos de 18 años.
El crimen
Los tres hombres obligaron al contratista a colocarse en el asiento del copiloto, mientras que su chofer se colocaba al volante. Según Miguel Ángel Zambrano, “el negro” sacó un mecate y comenzó a estrangular a Bozo y él y Ochoa a golpearlo hasta matarlo. El hecho se registró en el momento en el que manejaban en sentido circunvalación 2-kilómetro 4.
“Lo maté porque se estaba gastando todo el dinero y no me pagaba ni a mí ni a los trabajadores. Más bien yo tenía hasta que resolver cómo arreglaba la camioneta”, manifestó el chofer y presunto homicida, quien se encuentra detenido junto con sus cómplices, en los calabozos del Eje de Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc).
El cadáver de Ángel Bozo fue abandonado por los individuos en un terreno aledaño a Bomberos del Sur, en la Zona Industrial de San Francisco.
