Matan a balazos a taxista frente a una discoteca
Cinco orificios contabilizaron los sabuesos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), en el cuerpo de César José Reyes Rodríguez, de 51 años. Al taxista lo asesinaron a balazos, a las 2:30 de la mañana del lunes, frente a la discoteca Different Dance & Bar, localizada en la avenida 4 con calle 87 del sector Bella Vista.
Leandri Reyes, hijo mayor de la víctima, contó que su padre salió de su residencia 19F-131, en la calle Ricaurte del sector Altos de Jalisco, parroquia Coquivacoa, a las 12:30 de la mañana, porque haría una carrerita, en su Nissan sentra blanco, placas VAW78K.
Luego no regresó. Lo único que llegó a las 4:00 de la mañana fue la mala noticia de su asesinato, frente al establecimiento nocturno. “Una amiga de la familia llamó para la casa y nos dijo lo ocurrido”, recordó el joven de 28 años.
La víctima, al parecer, se trasladó hasta la discoteca a esperar otra carrerita. Familiares indicaron que mientras César esperaba en el frente, se formó una balacera y dos proyectiles lo impactaron. Uno en la cabeza y otro en el pecho. Los implicados en el crimen huyeron. El cadáver quedó tendido en el suelo y sin auxilio.
Otras hipótesis
Los sabuesos del cuerpo detectivesco informaron que durante las entrevistas realizadas en el lugar de los hechos se supo que Reyes, al parecer, estaba en el interior de la discoteca.
Dentro sostuvo una discusión con un hombre que luego lo siguió hasta el frente del establecimiento y lo tiroteó en cinco oportunidades.
“El Pavito de Urbe”, como era apodado César por sus seres queridos, murió en el sitio.
“No se trató de una bala perdida. El móvil de este crimen es la venganza”, dijo uno de los detectives que realizó las experticias y el levantamiento del cadáver, que trasladaron hasta la morgue de Maracaibo.
El Nissan sentra del taxista lo remolcaron en una grúa y lo trasladaron hasta el estacionamiento de la policía científica, vía al aeropuerto La Chinita, donde el equipo de criminalística lo sometió a pruebas de luminol para detectar huellas que ayuden a dar con el paradero de los homicidas.
Tristeza
Tres hijos dejó Reyes. El mayor está devastado, pero en medio de su tristeza recordó que a su padre lo llamaban “El Pavito de Urbe”, por la forma tan jovial como se vestía.
“Mi padre era un hombre demasiado alegre, trabajador, honesto, amoroso y taxeaba desde hace ocho años para sobrevivir. Con este oficio nos sacó adelante y cuidaba de su esposa y su madre, con quien vivía”, expresó Leandri.
El hijo de la víctima se armó de valor y se encargó de todo el papeleo para retirar el cadáver de su padre de la morgue forense.
A Reyes lo trasladó una carroza fúnebre, el lunes en la tarde, hasta el sector Altos de Jalisco, donde sería velado por sus parientes y allegados.
El local nocturno fue cerrado por las autoridades y los dueños hasta que las investigaciones estén avanzadas.
Los sabuesos del Cicpc colectaron varios videos de las cámaras de seguridad del lugar, para analizarlos y determinar quienes actuaron en la discusión y luego en el homicidio del taxista.
