Herido en vuelco del elevado lucha por su vida en el “Universitario”
Édgar Morán, de 22 años, conductor del Chevrolet Corsa rojo, que el pasado sábado en la tarde se estrelló desde el elevado en la avenida Delicias, se encuentra grave en el Servicio Autónomo Hospital Universitario de Maracaibo (Sahum).
Ayer, desde la mañana, en el sector El Saladillo, había una multitud de personas, los rostros amargos reinaban. Todos lamentaban la partida de María Chiquinquirá Pereira Ochoa, de 47 años, chef y ama de casa, y de su hermana de 44, Betzabeth Katiusca Fuenmayor Ochoa, secretaria. La alegría de ambas en esta época siempre contagiaba a toda la familia, un día antes del accidente pintaron su casa, siguiendo la lista de preparativos para las estas, según refirió César Ochoa, uno de sus 10 hermanos. Las enterrarán en el cementerio Sagrado Corazón de Jesús.
Jennifer Cabarcas, de 22 años, esposa de Morán y quien también estaba en el vehículo, “se salvó porque salió expelida por la ventanilla del carro y cayó en el pavimento del elevado”, dijo José Flores, esposo de María Pereira. La chef dejó cuatro hijos, entre ellos Jennifer, quien fue dada de alta y se encontraba en el acto velatorio enyesada en una silla de ruedas, y un menor de 16 años. La secretaria era madre de un joven de 15 años y otros dos varones mayores de edad. Morán, presuntamente, habría chocado con un Toyota Corolla blanco, al momento de cruzar, perdió el control del volante y la unidad se volcó. El otro vehículo se perdió de la escena.
Esa tarde las fallecidas regresaban de decorar y realizar comida para un compartir de Navidad en casa del jefe de María. Iban a cambiarse para volver a la celebración, agregó su hermano.
