Enero cierra con cuatro homicidios diarios
Los crímenes múltiples alertaron a toda la colectividad zuliana. Dobles homicidios, un triple y cuádruple fueron titulares. Esto generó alarma a toda la ciudadanía. Un conteo interno de Versión Final contabiliza un total de 134 homicidios en el primer mes de este 2017.
La mayoría de las víctimas que se registraron fueron hombres, 127 en total; cinco féminas y dos niñas. De los asesinatos cometidos, 119 se llevaron a cabo por armas de fuego, tres descuartizados, dos degollados, tres a golpes, un envenenado, un carbonizado, tres estrangulados y dos apuñalados.
De los crímenes más emblemáticos de este mes, uno ocurrió en el municipio Jesús María Semprún. Tres hombres, presuntamente miembros de la guerrilla colombiana, fueron hallados por sus familiares, en una zona limítrofe con Colombia, en avanzado estado de descomposición y descuartizados.
En otra latitud, en el municipio La Cañada de Urdaneta, cuatro pescadores fueron asesinados por “Piratas del Lago”. Los maleantes llegaron por el Lago de Maracaibo y emboscaron a un grupo de personas a las que obligaron a cargar con botes robados para después masacrarlos.
Ochenta por ciento de los crímenes se cometieron por venganza y ajustes de cuentas, mientras que la resistencia al robo no se hizo esperar como uno de los móviles más comunes.
Maracaibo es el municipio más violento, con 41 muertes; le sigue La Cañada de Urdaneta, con 13. En tercer lugar Cabimas, con 10 y Miranda, con nueve. En Valmore Rodríguez no se registraron crímenes.
Para el criminólogo Luis Izquiel la impunidad promueve el delito. “En Venezuela de cada 100 ciudadanos asesinados 98 casos quedan impunes. Lastimosamente estamos en un país donde la delincuencia está mejor armada que los cuerpos de seguridad, por lo que genera una inseguridad en toda la colectividad”, puntualizó Izquiel.
Una experta en Sociología, Edicsa González, concuerda con lo dicho por Izquiel y asegura que la sociedad “normaliza” el crimen motivado a la poca respuesta de los entes policiales.
“Los venezolanos vemos cómo en el país cada vez se cometen más crímenes diarios y hay poca respuesta, estamos cayendo en una ‘normalización’ de los homicidios. La pérdida de valores que inicia desde la casa está llevando a que cada vez más jóvenes estén delinquiendo”, refirió la socióloga.
Los cuerpos policiales liquidaron a 91 delincuentes solicitados por diferentes delitos en el estado.
Ocho personas fallecieron en muertes accidentales, 35 en accidentes de tránsito, ocho zulianos acabaron con sus vidas de diferentes formas, cinco murieron ahogados y cuatro por quemaduras.
La psicóloga Catalina Labarca revela que este incremento desacelerado en las muertes violentas en el país lleva a los ciudadanos a vivir en una “paranoia colectiva”.
“Estamos tomando una actitud de angustia que nos lleva a tomar decisiones desacertadas, al ver la poca respuesta de los cuerpos policiales son cada vez más lo venezolanos que deciden armarse y sin intención alguna contribuyen en el delito al portar armas de fuego sin la permisología”, contextualizó.
