Encuentran cadáver desmembrado, estrangulado y carbonizado
Dantesco. Vecinos del barrio Jesús de Nazaret, en la parroquia Idelfonso Vásquez de Maracaibo, se sorprendieron la mañana de este lunes al encontrar en el Cerro Ávila, debajo de un montón de cauchos, los restos de un cadáver.
El cuerpo fue desmembrado, en su cuello tenía rastros de un alambre con el que se presume fue estrangulado, y posteriormente carbonizado. A las 8:00 p. m. del domingo, vecinos se percataron del olor a caucho quemado y vieron las llamas del fuego que se presumen consumieron el cadáver, pero no fue hasta la mañana de ayer que hicieron el hallazgo.
A ciencia cierta se desconoce si se trata de un hombre o mujer; lo cierto es que sus asesinos pretendían deshacerse totalmente de sus restos.
Algunos manifestaron que vieron a varios hombres que llevaban un cuerpo y lo subieron a la loma, pasadas las 2:00 a. m. de ayer. Una vecina reveló que observó a cuatro sujetos subiendo a un hombre al cerro.
“La víctima es un hombre; cuando yo estaba viendo televisión a las 2:00 a. m. en mi casa, vi cómo llevaban a ese señor prácticamente cargado como si estuviera drogado o borracho cerro arriba y luego bajaron solos”, contó la mujer, quien prefirió resguardarse en el anonimato. Prosiguió relatando que al cuarteto lo respaldaban dos sujetos en moto.
La escena era terrorífica. El tronco y cráneo totalmente carbonizados. Pies, manos y piernas a unos metros, en igual estado. A las 10:00 a. m., moradores vieron el cadáver aún ardiendo, luego notificaron a los funcionarios del Cuerpo de Policía Bolivariana del Estado Zulia (Cpbez) quienes llegaron al sitio y notificaron inmediatamente al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC).
En el lugar encontraron un pasaporte que fue entregado a los sabuesos de la policía científica para iniciar las investigaciones. Para llegar al lugar y recabar las evidencias fue necesario subir por un intrincado camino.
Un antropólogo y un odontólogo del CICPC trabajarán para dar con el sexo de la víctima, pues quedó irreconocible. “Este sitio ha servido para cometer muchos delitos. Hace años acostumbraban a dejar cadáveres”, dijeron los vecinos.
Deshuesadero
Cerro El Ávila es conocido como un lugar donde los maleantes acostumbran a dejar carros para “enfriarlos” y luego cobrar rescate. “Desde hace mucho tiempo no recibíamos novedad alguna sobre este sitio; si no eran carros que dejaban enfriando, eran cadáveres”, reveló un oficial de la policía del estado. El lugar también sirve de basurero; se evidenció que varias familias de la etnia wayuu están invadiendo el terreno.
Los moradores repetían que la zona es bastante peligrosa y los delitos no cesan. “Acá el hampa nos mantiene azotados; somos víctimas constantes de atracos. Hace meses se metieron a robar en mi residencia y me dejaron sin nada”, informó uno de los vecinos, quien se encontraba en la escena del
crimen.
Los restos del fallecido fueron trasladados a la morgue forense de la Faculta de Medicina de la Universidad del Zulia (LUZ), donde los expertos tratarán de identificarlo.
