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Cúcuta: Hallan en la frontera a niña venezolana que huyó por temor a castigo

La menor de edad, quedó en custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar mientras restablece sus derechos y evalúa las condiciones de su núcleo familiar para permitir el retorno a su hogar

Este domingo terminó la pesadilla para María Alejandra Barón, la madre de una adolescente venezolana, de 11 años, que huyó de su hogar el pasado miércoles 14 de agosto y permaneció cuatro días desaparecida en el área metropolitana de Cúcuta.

Una familia, residenciada en el municipio de Villa del Rosario (Norte de Santander), en plena frontera con Venezuela, avisó a las autoridades que la menor se encontraba bajo su cuidado desde el jueves, cuando fue hallada en inmediaciones al puente internacional Simón Bolívar.

Tenemos dispuesto una ruta con el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) para restablecerle sus derechos”

Según las autoridades, la pequeña abordó una buseta y llegó hasta el municipio fronterizo luego de sostener una discusión con su mamá, que estaba molesta por haber dejado caer a su hermano menor, de cinco años.

Familiares aseguraron que la niña llegó a la casa de una tía, en el barrio Trigal Norte, de la capital nortesantandereana, y por miedo a recibir un castigo decidió huir de este sitio, donde se hospedaba por un tiempo de vacaciones.

Cuando llega a La Parada encuentra una familia que le da abrigo hasta este domingo en la mañana. Gracias a los medios de comunicación, este hogar identifica que es la niña que tienen a su cuidado y la llevan al CAI Industrial del área metropolitana”, precisó el coronel José Luis Palomino, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).

Desde el día de la desaparición, la institución activó un operativo de búsqueda que involucró a cerca de 300 uniformados, quienes repartieron volantes con la fotografía de la extranjera por las calles y el transporte público del sector donde fue vista por última vez.

La acudiente de la menor admitió a medios locales que agredió verbalmente a su hija y que empezó a establecer su paradero el miércoles a las 5:30 de la tarde, cuando cruzó palabras con ella y se ofuscó por un reclamo que le estaba haciendo.

Entretanto, una vez la Policía de Infancia y Adolescencia recibió a la menor, ella quedó en custodia del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) mientras restablece sus derechos y evalúa las condiciones de su núcleo familiar para permitir el retorno a su hogar.

 

 

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