Choferes de Pomona son víctimas del hampa en medio del luto
Choferes de Pomona amenazan con cerrar vías si las autoridades de la región no ponen de su parte para frenar la delincuencia que los agobia.
Horas antes del último adiós del chofer asesinado, Nelson Enrique Gil Arellano, de 66 años, dos trabajadores de la línea fueron víctimas del hampa. Los afectados cubrían la ruta cuando los robaron en la mañana del miércoles.
Un auto LTD y un Dodge Dart fueron los que se llevaron los hampones y aún no han dado con ellos. Los choferes denuncian que no tienen seguridad a ninguna hora del día.
Gil fue sepultado el miércoles, en el cementerio Corazón de Jesús rodeado de amistades, familiares y compañeros de labores.
Un evadido
Trascendió, por fuentes detectivescas, que otro de los implicados en el crimen del conductor habría huido hacia Maicao, donde vivía su familia.
Como José Maleiwa, habrían identificado al otro implicado en el asesinato de Gil, acontecido la tarde del pasado lunes.
Maleiwa, residente del barrio Los Pinos, cercano a donde ocurrió el hecho, sería azote del sector. Su compinche, quien confesó el crimen, lo habría delatado.
