“Cara Cortada” está detrás del cuádruple en Perijá
Tras la muerte que conmocionó a la comunidad rosarense en la cual perdieron la vida Adriana Acosta Garcés, de 30 años; sus primos Daliel, de 16; Elvis, de 18 y Francisco Toro, de 37, conocido como “El Cachaco”, ocurrida la madrugada de este martes, las autoridades están tras la pista de uno de los hampones más buscados en La Villa del Rosario.
Por el hecho, funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) buscan a Jonathan Guillen, de 33 años, expareja de Adriana, y a Alirio José Jiménez, alias “Cara Cortada”, buscado por los delitos de homicidio y extorsión en la subregión Machiques.
Ambos tienen orden de aprehensión, destacó una fuente detectivesca, quien agregó que “Cara Cortada” habría ingresado a la vivienda para cometer la matanza. Los sabuesos analizan los celulares de las víctimas, para ver si por algún cruce de llamadas atan a otros involucrados.
Despedida wayuu
En horas de la mañana de este miércoles les dieron cristiana sepultura en el Cementerio Municipal Jardines de la Paz de Rosario de Perijá a los primos.
Escoltados al estilo wayuu, con mujeres que iban vestidas con mantas de color rojo en símbolo de venganza, fue llevado el cuerpo de Adriana hasta el cementerio. Sus padres, hermanos y demás allegados lloraban alrededor.
El acto de sepelio se efectuó en la casa donde creció Adriana, mientras se preparaban para efectuar los rituales que se tenían previsto.
Los familiares, entre el llanto y gritos, pedían a Dios que sea vengara la muerte de la mujer. Dijeron que fue mucho el ensañamiento que tuvieron con sus parientes y piden a las autoridades que este crimen no quede impune.
Acosta se dedicaba al comercio, tenía un local donde residía, ahí, vendía detergentes para mantener a sus dos hijos. Entre los planes que tenía, era irse del país para buscar una mejor vida en Panamá. Fue educadora de una institución educativa por varios años. Se supo que el motivo de la separación con su expareja, padre de su hija menor, fueron los celos.
Guillen fue visto por última vez el lunes que llegó a la casa a buscar a su hija, a quien se llevó a la fuerza. Los padres de Guillen negaron saber sobre el paradero del hombre cuando fueron visitados por una comisión del Cicpc.
La actual pareja de Adriana era comerciante y pretendía vender un ganado en el sector El Cruce, municipio Jesús María Semprún.
El cuerpo de “El Cachaco” fue trasladado hasta Colombia, señalaron los familiares quienes estuvieron en la morgue de Maracaibo. Una amiga, quien no quiso identificarse, dijo que este tenía otra mujer con la que iba a contraer nupcias pronto.
