Bala fría mata a un joven con discapacidad
Varios hombres en un vehículo llegaron al barrio Los Tres Locos de la parroquia Antonio Borjas Romero, el pasado lunes a las 9:30 pm, y tirotearon la fachada de la casa, donde Mauricio Enrique Fernández González, de 25 años, dormía en una hamaca.
Uno de los proyectiles atravesó la puerta de la residencia y se alojó en el pulmón del muchacho con discapacidad. La bala fría lo mató en segundos. Los familiares de la víctima llegaron este martes en la mañana a la morgue de Maracaibo para retirar el cadáver.
Contaron, con dolor, que al “Bambam”, como era apodado su pariente por cariño, lo ultimaron mientras dormía. “Ya era tarde cuando pasó el vehículo de características desconocidas disparando contras la pieza de concreto donde residía Mauricio con su padre y su hermana”, dijo César Augusto González, tío del fallecido.
Según el familiar, en el sector nadie vio ni escuchó nada. Para el momento ya todos estaban resguardados en sus hogares, por lo solitario y peligroso que es el sector. Al escuchar las detonaciones, el padre de Mauricio se despertó y al llegar a la sala halló a su hijo inmóvil y el chinchorro destilando sangre. Los gritos de auxilio alertaron a los vecinos, quienes ayudaron a la familia y trasladaron al joven hasta el CDI de Plateja, donde los médicos certificaron su muerte.
César explicó que Mauricio “era de estatura pequeña y tenía un retraso, pues de pequeño convulsionó y le dio meningitis. Él era el consentido de la casa”. La víctima no estudiaba, pero trabajaba ayudando a su padre a cuidar el ganado que tenían dentro de la parcela en la que vivían.
Las autoridades del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) informaron que el ataque fue directo a la casa. “Tirotearon la fachada y una bala acabó con la vida del joven, cuando a quien buscaban al parecer era a su padre por una presunta venganza”.
