El diario plural del Zulia

Asesinan a dos venezolanos y los sepultan en pipas en Colombia

Marbelis Mavárez y su esposo habían contratado a dos compatriotas suyos para un trabajo de albañilería, pero estos habrían perpetrado el crimen y ocultaron los cadáveres en los envases cilíndricos, que taparon con cemento y arena amarilla

Dos venezolanos fueron asesinados por paisanos suyos y estos los metieron en sendas pipas que cubrieron con arena amarilla y con cemento. El dantesco hecho se registró en la población de Viotá, dos horas al suroeste de Bogotá, y los cadáveres fueron localizados por vecinos este martes en la madrugada.

Medios del estado Falcón aseguran que una de las víctimas era una profesora de Educación Inicial, Marbelis Mavárez, natural de Coro, y su esposo solo fue identificado como Guillermo, un militar retirado y abogado.

Vecinos de Viotá declararon a Noticias Caracol sobre el hallazgo de los cuerpos, en una residencia situada en esa localidad colombiana.

Ayer (lunes) empezaron a llamar los familiares del señor, del abogado, que no sabían de él, el venezolano no aparecía, la señora la estaban llamado, la esposa que también es venezolana, tampoco aparecía, ellos estaban trabajando en un restaurante. Nosotros de curiosos nos metimos anoche y había un olor muy fuerte. Alcanzamos a correr una ventana de un baño y precisamente había una caneca (pipa)… Como pude corrí la tapa con un palo y adentro había el cuerpo de una persona con arena amarilla… Se llamó a la policía y era el cuerpo de la muchacha. Más abajo habían metido al señor, pero en concreto”, dijo uno de los moradores.

Se conoció que Guillermo había contratado a dos venezolanos en el Terminal de Pasajeros de Bogotá, para que estos construyeran una piscina y una estructura para gallinas, en la parte delantera de la vivienda donde residían los infortunados. Atrás estaba previsto levantar un muro.

Al parecer, entre Guillermo, la profesora y los dos venezolanos hubo una discusión, que habría terminado con el doble asesinato.

Fuentes policiales identificaron a presuntos homicidas como Jesús, de unos 35 años, y José Alejandro, de 27.

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