Sin contendor, Maduro auparía cerco internacional
Adelantar la elección presidencial para el 30 de abril podría no ser la estrategia perfecta del Gobierno nacional. Mientras la oposición enfrenta un viacrucis frente a la decisión de participar o no en estos comicios, se asoma el panorama de emular lo que fue la contienda de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) con una candidatura en solitario: la del presidente Nicolás Maduro.
El director de Centro de Estudios Políticos de la Ucab, Benigno Alarcón, asegura que la oposición debe decidir de manera conjunta si participará o no en lo que cataloga como un “simulacro de elecciones”, al no presentar las condiciones electorales establecidas en la Constitución de la República y la Ley de Procesos Electorales.
De no ir los partidos opositores al proceso electoral, considera que el Gobierno volvería a retomar lo pautado por la ANC y lanzar a la candidatura al jefe de Estado, sin embargo, su mandato no sería reconocido por la comunidad internacional y Maduro tendría que enfrentar un calvario en cuanto a las relaciones internacionales, “la tensión sería aun mayor”.
“Dudo que en un proceso electoral que no es reconocido por actores internos e internacionales le sirva a este Gobierno para legitimar a Maduro, la comunidad internacional no reconocerá la elección y Maduro tendría que enfrentar no solo el rechazo que hay con la ANC, sino también con el repudio con su mandato”, sostuvo.
El experto en materia política señala que contarse en las votaciones es enfrentar el riesgo de un posible fraude ante la capacidad de maniobras que ha manejado el oficialismo en las últimas votaciones.
Controlando tiempos
El analista político, Carlos Raúl Hernández, explicó que el Ejecutivo con esta decisión no quiere dar tiempo para que la oposición resuelva sus diferencias y decida su candidato.
“Ellos quieren agarrar a la oposición en paños menores. El problema está en que cualquier candidato de la oposición entre los seis principales, le gana a cualquier candidato del Gobierno en una proporción de 70-30”, expresó.
Ante esto, el analista manifestó que esa proporción se puede ver afectada por un sector opositor que está llamando a no votar y al mismo tiempo desacreditando a todos los posibles candidatos.
Sobre la hipótesis de una posible candidatura de Lorenzo Mendoza, acentúa que sería una puesta muy arriesgada, “porque él sabe que lo que viene en contra de sus empresas es una ofensiva furiosa”.
Ana María Osorio, experta en marketing político, asegura que en este momento quien está ganando la elección es Nicolás Maduro, pues el sector opositor se presenta totalmente desunido, con un quiebre y sin estrategia concreta.
A su juicio, la oposición debe ir a los comicios con una estrategia acertada, sin necesidad de acudir a unas primarias, pues esto “mutilaría” a la coalición. Añade que de no entrar al juego electoral se le estaría entregan do el país al Gobierno nacional.
“Una estrategia acertada sería seguir con la idea de que van a primarias y suspenderlas antes de la inscripción de los candidatos e ir con un outsider de la política, el empresario Lorenzo Mendoza, sería la mejor opción porque cuenta con el respaldo del pueblo y genera esperanza de cambio”, comentó.
Osorio insiste en que la salida pasa por un outsider de la política porque no hay confianza dentro de los actores políticos que están en contra de Maduro, “la perdieron por ellos mismos”.
“La oposición con los mismos actores políticos no tiene la oportunidad de ganar, mientras que el Gobierno tiene la mayor fuerza, dominación y chantaje político con el bono o Carnet de la Patria y que lamentablemente la gente canjea un voto por un bono”, expresó.
