El diario plural del Zulia

Simplificación cambiaria aniquilaría al dólar paralelo

No está permitido –por las autoridades del Gobierno– mencionar su nombre. Pero su autoridad está por encima de la Ley. El entonces vicepresidente del área económica, Rafael Ramírez, dijo en noviembre del 2013, “derrotaremos la guerra económica desatada por la burguesía parasitaria y pulverizaremos al dólar paralelo”. Lo cierto es que el “dólar innombrable” estaba en 64,23 bolívares, hoy, poco más de tres años después, se ubica al cierre de esta rotativa en: Bs. 8.293.

Especialistas en economía aseguran que con una simplificación del control de cambio fulminaría al tan temido dólar negro, en el lapso de uno o dos años. Rodrigo Cabezas, exministro de Economía y profesor titular de Economía de La Universidad del Zulia (LUZ), sostiene que más allá del funcionamiento parcial de un sistema cambiario, urge en el país un proceso de unificación que permita superar las distorsiones. “Con la simplificación cambiaria vamos a poder vencer lo que se produjo en estos últimos tres años, una ola de especulación, de acaparamiento, y sobre todo, el contrabando de extracción hacia Colombia y Brasil de alimentos y de gasolina, que es de proporciones descomunales”.

El exministro, durante el Gobierno del expresidente Hugo Chávez, espetó que los problemas económicos han originado: acaparamiento, bachaqueo y contrabando, en su opinión, la oferta de bienes en la nación está dificultada y por tanto es una especie de gasolina para la inflación. Omar Muñoz, profesor jubilado de la facultad de Economía de LUZ, hay un desequilibrio en el mercado y una distorsión en la oferta de dólares y en el esquema de consumo. “Tiene que haber un equilibrio que nos lleve a un proceso de ajuste en el tiempo, pero se deben garantizar las demandas en bienes importados”.

Dólares insuficientes

El sistema de divisas de tipo de cambio complementario flotante de mercado (Dicom) no cubre la demanda de dólares de la nación, haciendo que el paralelo se fortalezca con el pasar de las horas. El Banco Central de Venezuela (BCV), adjudicó el miércoles, en la cuarta subasta, un total de 30.300 millones de dólares para personas jurídicas y personas naturales postuladas, según el anuncio del director del ente regulador, Pedro Maldonado. En la totalidad de subastas se han liquidado 99 millones 922 mil dólares, de los cuales el 90% fue para personas jurídicas con la asignación de 89 millones 806 mil dólares y el 10% corresponde a las personas naturales con 10 millones 115 mil dólares. El presidente del comité de subastas de divisas destacó que los sectores productivos han recibido el 73 % de los dólares.

Edinson Morales, profesor de Política Tributaria y Gerencia Financiera de la Universidad Rafael Urdaneta (URU) las subastas no satisfacen la demanda de la nación. A su juicio, la caída brutal de las reservas internacionales tiene al Gobierno en jaque.

“No hay posibilidad que Dicom compita con el paralelo porque está dejando de atender una cantidad de demanda muy alta. Es posible que parte de los dólares obtenidos en el Dicom estén llegando al mercado paralelo y sean canjeados al tipo de cambio no oficial”, aseveró Morales.

Estado ideal

“El estado ideal de una economía es que la relación con la divisa tenga un solo y único precio”, argumenta, el exministro Rodrigo Cabezas. “Ese es el estado ideal, con la simplificación se puede lograr en uno o dos años un solo y único precio de la relación de divisas con nuestra moneda nacional. Cabezas dijo que estas medidas deben direccionarlas el Estado con políticas cambiarias.

En desacuerdo con este planteamiento, Omar Muñoz, economista, asegura que el país no se encuentra en una situación “ideal”, en su percepción, Venezuela vive un acoso financiero internacional. “Estamos navegando contra la corriente, hay una opacidad en el manejo de las fuentes de divisas, no sabemos a quien se las están otorgando”.

Economistas concluyen que la debilidad que tiene el país en las divisas hace que el dólar negro cobre poder. Sostienen que el aparato estadal no puede cubrir las necesidades de la demanda, lo que posiciona al dólar no oficial como marcador de precios por la falta de confianza en las expectativas que ofrece el Gobierno.

Lea también
Comentarios
Cargando...