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¿Más armas para reprimir?

La reincidencia de las protestas nacionales no detuvieron al ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, quien arribó a Moscú para participar en la VI Conferencia de Seguridad Internacional, evento que podría ser aprovechado por el jefe de la Fuerza Armada Nacional (FAN) para adquirir armamentos.

Rusia es uno de los principales proveedores de armas al Gobierno nacional. La cercanía de Vladimir Putin se ha mantenido desde los tiempos del fallecido expresidente Hugo Chávez.

El presidente Nicolás Maduro anunció en diciembre del año pasado que el mismo ministro de Defensa estaría viajando a China y a Rusia para cerrar acuerdos y traerse tecnología bélica y armas de estos países, con el objetivo de equipar fuerzas especiales, incluidas las que deben controlar disturbios sociales.

Según el especialista en Seguridad y Defensa, Hernán Castillo, desde que llegó Chávez al poder aisló a Venezuela del hemisferio occidental para unirse con los países enemigos de ese territorio, fue cuando inició la relación con Rusia, China y otras potencias dictatoriales del mundo, que “abrieron el paso a una relación militar y defensa que rompía la historia venezolana”.

Debido a la situación, a Castillo no le resulta extraña la visita de Padrino López a Moscú, ante el aislamiento en el que se encuentra el país y los conflictos internos que presenta.

“Ante la situación interna de protestas democráticas, no es raro que busquen apoyo en los rusos que sabemos que tienen relación con Fidel Castro (…) Hay muy poca información y los anuncios son oscuros, pero en vista de las palabras del Presidente, no es extraña la visita”, destacó.

El experto en el área castrense estimó que en compra de armamentos se han destinado entre 20 y 30 millones de dólares, sin embargo, la cifra no se sabe con exactitud, debido a la falta de información por parte del Ejecutivo.

Refuerzo antimotín

El diputado y miembro de la Comisión Permanente de la Contraloría, Carlos Berrizbeitia, rechazó que el ministro se ausente ante el malestar social que enfrenta el país y aseguró que no cabe duda que durante su estadía junto al gobierno ruso, el funcionario concrete acuerdos de armas y equipamientos antimotines en medio de la ola de protestas que enfrenta el país y de una presunta disminución de municiones.

El parlamentario resaltó que en los últimos tres años, el monto para la compra de antimotines superan los 3 millones de dólares, que han sido repartidos en todos los estados del país en mano de la GNB y la PNB.

“Se ha invertido una inmensa cantidad de dólares en equipos antimotines y se han usado contra la población (…) No hay dudas de que habrá ido para tratar ese tema”, subrayó.

Luis Alberto Button, experto en Seguridad y Defensa, rechazó que el Gobierno siga destinando recursos a la compra de armamentos, antes de priorizar la crisis alimentaria y de salud que atraviesa el país.

Señaló que los montos destinados a la adquisición de equipos de defensas superan los presupuestos de la Organización Mundial para la Alimentación, la Organización Mundial de la Salud y de la oficina de la ONU en materia de refugiados.

 

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