El club Clap
Usted o su vecino pueden ser líderes comunitarios, pero no bastará para conformar un Consejo Local de Abastecimiento y Producción (Clap) si no son miembros de la Unión Nacional de Mujeres de Venezuela (UnaMujer); o de las Unidades de Batalla BolívarChávez (UBCh); o del Frente Francisco de Miranda (FFM), o de algún consejo comunal. El Poder Popular organizado en el diccionario oficialista.
Esas cuatro instancias encabezan la distribución de productos regulados casa por casa y existe una razón: control de la información. El presidente Nicolás Maduro necesita saber con exactitud cuántos artículos se distribuyen y a quién para evitar que caigan en el mercado negro. Y esos cuatro canales son los más numerosos y confiables para el mandatario. Además, se harán contraloría entre sí.
“Tenemos que tener la garantía de que las cosas lleguen y no se bachaqueen. Es una política del Presidente y por lo tanto él debe tener información precisa”, explica Giovanny Villalobos, secretario regional de Gobierno. “Si se lo dejamos a una sola institución, empiezan los tráficos de influencia. No queremos dogmatizar con algo tan importante como el alimento”.
A organizarse
¿Y qué pasa con las comunidades donde no haya miembros de ninguna de esas cuatro instancias?
Si la comunidad no tiene consejo comunal, que no es el estado deseable, deberá reunirse con las fuerzas que allí operen, promover la organización popular a los fines de garantizarle el alimento”, explicó en abril Gladys Requena, ministra de la Mujer y la Igualdad de Género.
En esos casos se deberá nombrar una comisión con representantes por calle que asuman la conformación del Clap y, al mismo tiempo, la constitución de un nuevo consejo comunal. para hacerse cargo de la venta de los productos regulados.
“En Venezuela hay más de 45 mil consejos comunales, entonces habrá más de 45 mil Clap. No es sólo un reparto de bolsas sino una organización del pueblo para asumir el tema de la soberanía y la seguridad alimentaria”, precisó Requena.
Pero Carlos Montero, economista y docente universitario, opina que es imposible crear un comité de abastecimiento en una urbanización o en una villa, porque se trata de comunidades consolidadas donde la mayoría de las necesidades (las básicas, cuando menos) están cubiertas.
“¿Dónde están los consejos comunales?, en los barrios, donde están las necesidades. La gente se organiza en los barrios; en las villas, las urbanizaciones, los edificios, la acción del Estado a través de los Clap se le va a hacer difícil porque no hay organización”.
