Economistas: Constituyente liquidará la producción
Efectos negativos, dicen los economistas consultados, que tendrá la Constituyente económica propuesta por el presidente, Nicolás Maduro, argumentando que se está “mal interpretando y mal usando” el mecanismo consagrado en la Carta Magna.
“El mecanismo Constituyente es bastante claro. La Constitución no sectoriza la Constituyente en económica, militar, comunal o política, la Constituyente es un mecanismo que busca reordenar el Estado como un todo y cambiar de plano el texto constitucional, eso está claramente explicado, lo otro es, simplemente, una interpretación muy mala para dar un muy mal uso del mecanismo y acomodarlo al interés del proponente”, explicó el economista y docente Mario Prieto.
Sus efectos, argumenta el economista Manuel Cipriano, serían nefastos para el productor, por cuanto busca otorgar rango, valor y fuerza de ley a un sistema comunista —a lo cubano— que se ha venido imponiendo.
Negado hace 10 años
“Consideramos que este planteamiento constituyente persigue instaurar con rango, valor y fuerza de ley el comunismo puro a través del control unilateral del Estado de los medios de producción de alimentos, bienes y servicios, es constitucionalizar un sistema fracasado como el de los Comité Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), proporcionar la legitimidad que no tienen las milicias, con lo cual se busca imponer de nuevo la nefasta enmienda que en 2007, el pueblo le negó a Chávez vía referéndum”.
Cipriano agregó que de aprobarse la Constituyente, habrá mayor asfixia al sector productivo, será el Estado el que imponga las reglas y elimine la propiedad privada y la libre empresa.
¿Un negoción?
Para el economista Miguel Díaz, el efecto de la Constituyente económica sería nefasto, en tanto se prime un sistema que privilegie la importación y liquide la producción.
“Se plantea un mayor control sobre las empresas básicas, la empresa privada, nuevas confiscaciones con el pretexto de la nacionalización, trayendo más desempleo, más desabastecimiento, más corrupción y escasez.
Alertó que de aprobarse este “disparate”, el Estado alejará aún más la inversión privada, que es la garantía de una sostenida recuperación económica de la cual está urgido el país.