El diario plural del Zulia

Aumento salarial no mejora el poder adquisitivo

A sólo 96 horas de un posible anuncio gubernamental al que nos tiene acostumbrado, Nicolás Maduro Moros, presidente de la República, el venezolano espera un salvavidas que rescate el salario mínimo de la crítica situación económica que la inflación ha provocado.

Los cuatro aumentos de salario del 2016, según palabras de Maduro, sumaron un incremento del 454 %.

El Ejecutivo se jacta de “vigilar y proteger” el ingreso de los trabajadores de la Nación pero la realidad es adversa, el dinero se desvanece antes de pasar por la mano del ciudadano.

No es exagerado, esto lo constata el más reciente informe de la Organización No Gubernamental (ONG) Provea, que a través de la sesión final de adopción de recomendaciones del 2º Examen Periódico Universal (EPU), del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas (ONU), informaron que 82% de la población venezolana vive en pobreza.

Francisco Martínez, presidente de Fedecámaras, informó que el Gobierno ha violado el convenio internacional de la organización del trabajo, al no convocar a los empresarios ni a los sindicatos de trabajadores para la fijación del salario. “Nuestro planteamiento es el mismo, no hay sistema salarial que solucione a los trabajadores hasta que se aborde el problema inflacionario. Urge controlar la inflación, para eso hay que disciplinar el gasto fiscal”.

Capacidad de compra

Los teóricos de las ciencias económicas afirman que la capacidad adquisitiva del consumidor se puede medir sabiendo cuantos bienes y servicios puede adquirir para satisfacer sus necesidades.

Expertos sostienen que el poder de compra de los venezolanos cayó un 80%. Consideran insatisfactorio un aumento de salario que aceleraría los costos operativos de las empresas y elevaría considerablemente la inflación.

Fundamentado en la misma teoría, Luis Bravo, presidente del Colegio de Economistas del Zulia, cree que, sin medidas compensatorias, los incrementos del salario no tendrán el efecto esperado.

“Mientras exista una escalada inflacionaria la estrategia ortodoxa del incremento del salario no surtirá efecto. Deben haber ajustes periódicos para recuperar la capacidad adquisitiva. El Estado debe velar por eso, pero esto demanda también un acuerdo entre las partes, empresa, trabajador y Gobierno para que los aumentos no se conviertan en sal y agua, no se diluyan”, resalta Aguirre.

Por su parte, Adolfo Pérez, profesor universitario con más de 30 años en el área macroeconómica y de planificación financiera, dijo que el venezolano seguirá teniendo más pero comprará menos. El economista subraya que otro aumento pondrá contra la espada y la pared a las industrias quienes no tendrán la fluidez económica para cancelar el nuevo salario. “Maduro dice que el pueblo tiene más, y se alaba de los aumentos que ha dictado, pero esto sucede en términos nominales no en términos reales, porque en la calle el venezolano compra menos. Se produce un efecto precio, ya que el aumento en cuestión de horas, impacta los costos donde siempre la inflación avanzará galopante”.

Aumento estéril 

Emmanuel Borgucci, miembro de la Academia de Ciencias Económicas del Zulia manifestó que los aumentos del Ejecutivo son “estériles”, reitera que no habrá ninguna mejora en el bolsillo de los venezolanos. “Será un aumento de inflación por decreto, el grado de deterioro del aparato productivo es indicativo de que la escalada de la inflación está creciendo a una velocidad poderosa”. Economistas estiman que el aumento salarial rondaría entre 30 y 40%, ubicando el sueldo mínimo entre 52.833 o 56.893 bolívares.

Francisco Martínez visualizó el problema de la misma manera que Emmanuel Borgucci. Ambos coincidieron en que es propio de los gobiernos socialistas la carencia de teorías económicas que someten a los países a la improvisación en todas las medidas que aplican para la administración de una nación. “Intentan satisfacer la rabia de la gente aumentando el sueldo. Este desastre tiene más de 20 años, fue provocado por la destrucción de las fabricas, para que esto tenga solución se deben recuperar los espacios productivos porque sólo así los patronos podrán beneficiar de mejor forma a los trabajadores, pero primero se debe frenar la inflación”.

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