El diario plural del Zulia

El padre Arturo Sosa y el prejuicio de la equidad, por Énder Arenas

Todos los días nos encontramos con un tipo muy particular de opinadores, de analistas de la política, profesores universitarios que también dicen ser analistas de la política, algunos opositores, sobre todo algunos opositores y últimamente chavistas opositores a Maduro, que dicen “ sí, pero…” y justo el martes, nos topamos con las declaraciones del nuevo “Papa negro”, Arturo Sosa, que es profesor universitario y analista de la política, quien se ha erigido como el nuevo campeón del equilibrio.

Él y muchos otros que caen en la categoría de los antes nombrados suelen decir cosas como la que cita la analista Brooke Gladstone, autora del término “prejuicio de la equidad”: “Ah, sí, profesor Smith, gracias por defender que la Tierra es redonda, y ahora voy a dar el mismo tiempo y respeto a Mr. Jones, que asegura que la Tierra es plana”.

Así, por ejemplo, se dice: “el gobierno es malo, pero igual de malo es la MUD”, “Carajo que grosero es Maduro, pero Henry Ramos es un viejito coño e' su madre, también”, “El gobierno no hace nada, pero la MUD no ha hecho ni hace nada”, “hay que revocar a Maduro… y a la MUD también”, “el Gobierno está vendido a los cubanos y la MUD también está vendido, pero al Gobierno”. Podemos citar un centenar de frases, incluso, peores que esas, como son aquellas que suelen escribir Patricia Poleo o Marianela Salazar o el inefable Armando Duran, solo para citar unos pocos.

Pero veamos qué dice el padre Sosa: “…ni el Gobierno ni la oposición ‘tienen un plan para resolver la situación del país’”. Esta aseveración la hace el padre Sosa señalando que ninguno de los dos actores es capaz de ofrecer un proyecto de país independizado del rentismo petrolero. Es raro que el padre Sosa no haya revisado declaraciones, documentos y planes de gobierno de candidatos opositores que no pasaron nunca a gobernar. Yo he leído unos cuantos documentos, planes de gobierno opositores y he escuchado declaraciones donde la oposición que, ahora, frente a la salida de Maduro es una identidad colectiva, en la que se menciona una buena cantidad de planes, donde se enfrenta al rentismo, proponiendo una nueva relación entre el Estado y la sociedad, el Estado y el mercado, una nueva relación con el capital, con el sector salario, inclusive una nueva relación con el petróleo.

Ahora bien, sobre la inexistencia de planes para salir de la situación de crisis, lo seguro es que el Gobierno no lo tiene y el proyecto de país que dice tener está esbozado en algunas páginas amarillentas del “marxismo vulgar”. En efecto, han gobernado durante mas de 17 años y solo se han convertido en los productores más e caces de crisis. Crisis que está asociada a fallas de rendimiento de gobierno por incompetencia, fallas de gobernabilidad, inflación alarmante, en buena medida porque ellos se convirtieron en los animadores de los giros especulativos de la economía y entre otras cosas, la perdida, después de la muerte de Chávez, del timing para vincularse con la sociedad que ahora les da la espalda.

Que el padre Sosa señale que la oposición no tiene un proyecto para resolver la crisis creo que es una lectura inexacta de alguien que, eso es verdad, ha sido un estudioso de la vida y la historia del país. Yo le recordaría humildemente al “Papa negro” que el orden social se organiza desde el poder. El poder genera realidad y genera al mismo tiempo su propia legitimidad. Obviamente, el proyecto o el plan de la oposición pueden no visibilizarse porque nadie pretende ordenar la realidad social fuera del poder especialmente con un cuadro institucional democrático inexistente.

En todo caso, creo saber el plan que nos ofrece el padre Sosa, pero lamentablemente, el paraíso está muy lejos.

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