El diario plural del Zulia

Orgullosos de ser zulianos, por Judith Aular de Durán

Hablar de la zulianidad, es sin duda hablar de lo nuestro, nuestras raíces, nuestra gente, nuestro folclor, en esencia eso que nos representa en cualquier latitud del mundo.

Esta semana celebramos la zulianidad, evocando aquel 28 de enero de 1821 cuando el gobernador de la Provincia de Maracaibo, Francisco Delgado, declaró su independencia, representa la viva, muestra del tesón y la fuerza que nos caracteriza y de lo que somos capaces de lograr cuando luchamos por nuestros objetivos.

Esta acción es considerada como la primera decisión política tomada autónomamente por el pueblo, en defensa de su identidad y los intereses nacionales. Posteriormente, en el 2002, el entonces gobernador del estado, Manuel Rosales, decretó el 28 de enero de cada año como Día de la Zulianidad. El momento es propicio para enaltecer esas cosas por las que nos sentimos orgullosos de haber nacido en esta tierra bendita, donde “llegó el creador con los más bellos colores, pintó casitas y ores y gente llena de amor”.

“Quién no se alegra de haber nacido en esta tierra gratificante y llevar la gaita como estandarte con los momentos que hemos vivido”, como no deleitarse con nuestra rica gastronomía, única en Venezuela, los sabrosos patacones, las mandocas, los yoyos, el chivo en coco y ni mencionar la exquisitez de las paledonias, los huevos chimbos y la conserva de plátano.

Eso que nos identifica en cualquier parte de Venezuela, además del tradicional dialecto jolgorioso, el espíritu estero, alegre y servicial hace de nosotros y de esta región única e inigualable.

Quizás estas líneas se queden cortas para expresar la bondad de esta tierra que le dio el nombre y la libertad a Venezuela.

El Zulia, también es escenario de majestuosos paisajes naturales, bañados por el lago, como las Ciénagas de Juan Manuel, cuna del imponente relámpago del Catatumbo, hermoso destello que hace resplandecer las noches zulianas.

Pero la razón por la que debemos estar más orgullosos, es por nuestra “Alma Mater”, la ilustre y centenaria Universidad del Zulia. La casa que tiene 125 años y que sigue formando generaciones de jóvenes esperanzados en construir una mejor sociedad a partir del conocimiento. ¡Viva el Zulia!

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