El diario plural del Zulia

Las Bodas de Titanio de Medicina, por Judith Aular de Durán

La universidad está de júbilo. En 1946 la Universidad del Zulia renacía de las sombras de la clausura acompañada por tres de sus hijas más ilustres: Medicina, Derecho e Ingeniería.

“Siete decenios y una titánica historia”, excelente lema para este septuagésimo aniversario. Una historia cargada de glorias y avances científicos como la cuna de los médicos zulianos.

Qué orgullo sentimos los universitarios cuando recorremos las huellas de la historia pasada y reciente, apreciando en cada avance el legado de los fundadores que nos precedieron con ideas y proyectos académicos de vanguardia.

Con ese desafío, nació la Facultad de Medicina en 1946, como digna heredera de la legendaria Facultad de Ciencias Médicas.

La primera sede de la renovada Facultad fue la Casa del Obrero, en La Ciega. Luego se traslada a las adyacencias del Hospital quirúrgico y progresivamente consolida su sede actual, al lado de la Maternidad Armando Castillo Plaza, en ese fabuloso edificio estilo art déco, patrimonio arquitectónico de la región.

Desde estos espacios ha conquistado el respeto y el prestigio nacional e internacional y se ha hecho grande sumando el esfuerzo de sus extraordinarias escuelas: Medicina, Enfermería, Bioanálisis y Nutrición y Dietética.

Hoy rendimos tributo a los intelectuales y visionarios que la fundaron. A su primer decano, el doctor José Ordoñez Marín y a los docentes pioneros cuya herencia ha sido multiplicada con el talento de miles de científicos y estudiantes destacados.

La Facultad de Medicina del presente mantiene en alto ese compromiso de promover educación de calidad y de estimular el trabajo de investigación en tiempos de crisis que nos obligan a ser más creativos.

Esos triunfos nos hacen crecer como universidad y son la esperanza para seguir avanzando en la conquista de un proyecto educativo de calidad y competencia que promueve el desarrollo de la región y su libertad intelectual, máxima aspiración de aquella generación combativa de intelectuales, guiados por el maestro Jesús Enrique Lossada.

Felicitaciones a todos por estas Bodas de Titanio, al decano Sergio Osorio y a su valioso equipo de trabajo, en especial a los estudiantes, trabajadores y docentes que hacen vida en esta Facultad. Los invito a seguir cosechando éxitos que enaltecen nuestra ilustre Universidad del Zulia.

 

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