El diario plural del Zulia

Exigimos que nos dejen participar, por Nicmer Evans

No es solo un problema jurídico o constitucional. La decisión de no activar un referendo consultivo para que el pueblo participe de manera directa y protagónica en la activación de una Asamblea Nacional Constituyente y la aprobación de sus bases comiciales, es sin duda alguna, contrario no solo a los principios de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, al legado de Chávez, al socialismo democrático, sino, fundamentalmente al pueblo venezolano.

Este Gobierno no solo desconfía del pueblo, sino que le niega la posibilidad de seguir profundizando la democracia, y esta acción delimita claramente su perfil. Si le damos la oportunidad de que instauren una dictadura constitucional lo harán, y lo peor es que lo pretenderán hacer con la justificación de: constitucionalizar los CLAP y el carné de la patria. Siendo esta la mayor promesa para el pueblo me pregunto ¿Además de querernos controlar nos ven cara de imbéciles?, ¿Acaso lo que pretenden al constitucionalizar los CLAP y el bendito carné es que asumamos que tendremos que depender eternamente de las migajas que nos tire un gobierno autoritario para así depender de ellos?

Decía el arzobispo brasileño Hélder Cámara, militante de la teología de la liberación: “Si cuido a los pobres me llaman santo; si pregunto por qué son pobres me llaman comunista”. Hoy, el gobierno de Maduro quiere ser santo, ayudando a los pobres con cajas del CLAP y ofreciendo el paraíso con el “bendito carné de la patria”, pero es tan profundamente anticomunista, antisocialista y reaccionario que si pides las estadísticas de desnutrición o de pobreza o planteas una política donde el pueblo adquiera autonomía y deje de lado la dependencia entonces eres perseguido, acosado y denigrado. El Gobierno es tan antisocialista que incluso ante cualquier oposición, hoy no hay duda que es de derecha. Hoy gobierna en Venezuela la derecha endógena, el nido de alacranes.

 

Lea también
Comentarios
Cargando...