El lago que nos une, por Francisco Arias Cárdenas
El lago de Maracaibo –así lo creo firmemente– es un vórtice de buena energía para la cuenca, con capacidad de irradiarse a todo el país.
Por eso nos empeñamos en su salvación, en el resarcimiento del daño que a su ecosistema le hemos causado, particularmente a raíz del dragado profundo de su canal de comunicación con el golfo para permitir el paso de los grandes tanqueros petroleros, cuando la industria extractiva sustituyó bruscamente toda otra actividad productiva, particularmente la agropecuaria.
En este espacio de olas y riberas, que comunica con las tierras más fértiles de Venezuela, se libró la última y definitiva batalla que selló la Independencia de nuestra patria del imperio español, en el siglo XIX. Por eso, tiene especial significación el que haya sido el escenario zuliano del ejercicio militar Soberanía Bolivariana 2017, que tuvo como objetivo el puente General Rafael Urdaneta, el cual une las costas oriental y occidental del lago, enlace vital con el territorio nacional.
Frente a ese lago, escenario de victoria e independencia definitiva de la patria grande de Bolívar, mostramos nuestra voluntad de ser garantes de nuestra soberanía, unidos más que antes con la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, acompañando las operaciones con honor, energía, alegría y compromiso por la Patria.
Ante las decisiones injerencistas y dañinas del gobierno de EEUU contra Venezuela, estamos enlazados vitalmente, comprometidos con recuperar nuestra economía y defender nuestra soberanía. Justificar medidas que dañan a nuestras finanzas y afectan al pueblo, es intolerable para cualquier venezolano que se precie de tal, a menos que el egoísmo y la sed de poder le gobiernen el corazón.
La razón, el respeto y la justicia habrán de imponerse tanto en el ámbito internacional como interno, y desde esta región zuliana, generosa, pródiga y leal como sus héroes y heroínas –Rafael Urdaneta, Ana María Campos, entre muchos- brindamos nuestro aporte productivo para que Venezuela resurja de esta época, más próspera y soberana que antes.
