El diario plural del Zulia

El diablo los junta, por Hugo Cabezas

Miami vuelve a dar cobijo a un encuentro nada sacrosanto. El viernes trece del mes en curso se reunieron en ella, representantes del terrorismo internacional encabezados por el franquista español José María Aznar, el paramilitar colombiano Álvaro Uribe y el nuevo peón del aventurerismo antidemocrático y tonto útil, Luis Almagro.

Pasaron revista a la “situación” de Venezuela y llegaron a la conclusión que definitivamente, el oposicionismo no garantizaba el éxito del golpe de estado contra el Presidente Constitucional Nicolás Maduro. Evaluaron las decisiones adoptadas por la mentada MUD, y terminaron de convencerse de la incapacidad de sus dirigentes, para alcanzar tal objetivo. La prueba más contundente de ello era la manera errática con que habían convocado el referéndum: ni eso supieron hacer, dicen que espeto, Aznar. Así como también, analizaron con preocupación el hecho que el oposicionismo perdió el poder de convocatoria del pueblo venezolano: las últimas marchas han sido literalmente pauperrimas, la gestión del adeco refranero Ramos Allup en la Asamblea Nacional solo ha servido para su promoción, y pare usted de contar. En fin afirmaron, “no damos pie con bola”, y en la medida que pasa el tiempo, Maduro se recupera. Las medidas de emergencia económica, la lucha contra la delincuencia organizada y contra el “bachaquerismo” comienza a darle buenos resultados.

Ante esta situación, el celestino inefable Almagro, informó lo “cuesta arriba” que resultara aplicarle la Carta Democrática Interamericana a Venezuela. “Los votos no nos dan”, dijo con un dejo de preocupación. Venezuela tiene mucho apoyo, además, ningún país quiere hacerle a otro lo que después pueden hacerle a él.

No hay otra salida, grito con rabia y amargura, el paramilitar Álvaro Uribe: “Las cosas se me ponen difíciles. Me comprometí, primero con Bush y luego con Obama, que con mis hombres derrocaría el chavismo y no lo he logrado. Tenemos que decirle al gobierno de Estados Unidos que la única forma de salir de Maduro es a través de la conformación de un ejército internacional, para invadir a Venezuela”. Que la soberanía nacional y la libre determinación de los pueblos, son cuento de camino; que la Carta de la OEA y la Carta Democrática Interamericana, son documentos fatuos. Por otra parte, la pésima actriz, Lilian Tintori, quien tenía su mente trasladada a las paradisiacas playas de Aruba, dijo: “hagan cualquier cosa, pero no liberen a Leopoldo”.

 

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