Despertar la esperanza en LUZ, por César Ramos Parra
Quiero dedicar mi reflexión a resaltar la actividad cumplida esta semana con la entrega de certificados de aprobación de los cursos de Gerencia Sindical para miembros de ASDELUZ y SOLUZ de nuestra Alma Máter y el curso de Liderazgo, dirigido a estudiantes de nuestra Universidad del Zulia. Suman en total, 90 personas formadas en 3 cursos desarrollados durante 144 horas académicas cada uno, como una actividad de la Cátedra Libre Responsabilidad Social Universitaria de LUZ, en alianza con nuestras organizaciones gremiales, la Facultad de Ingeniería, el Núcleo LUZ-COL y la Fundación Humanismo y Progreso, orientadas a lo formación de ese nuevo líder que reclama la construcción del paradigma universitario por el cual luchamos: LA UNIVERSIDAD DE SERVICIO (UNISERLUZ).
Estamos preparando todos los frentes para cuando llegue el momento de relanzar nuestra Alma Máter. La formación de sus líderes, sin duda, es fundamental. Es imprescindible rescatar en LUZ, sus principios y valores, el sentido de identidad y pertenencia para impulsar en su comunidad una renovada cultura de servicio, sustentada en elementos de calidad, innovación y responsabilidad social, atributos fundamentales sobre los cuales se soporta el nuevo modelo organizacional.
El primer elemento lo constituye el capital humano e intelectual. De allí la necesidad de destinar sostenidos esfuerzos al desarrollo de una nueva cultura organizacional que viabilice el establecimiento del nuevo modelo. Que despierte el entusiasmo, sentido de pertenencia y compromiso con la institución. LUZ necesita recuperar su alegría, su identidad, su liderazgo social y ese constituye el objetivo central de nuestro esfuerzo.
El segundo elemento está representado por el proyecto, con el cual construiremos la nueva visión y misión institucional, renovando y fortaleciendo sus valores y principios, de manera concertada, donde se definan sus grandes objetivos, en docencia, investigación, extensión, desarrollo organizacional así como las acciones de corto, mediano y largo plazo que respondan al impulso de una organización innovadora y en sintonía con la Sociedad del Conocimiento expresiva del mundo postmoderno.
El tercer soporte está representado por la relación con el entorno socioproductivo. Es la necesaria e imprescindible incorporación y participación de la sociedad organizada en favor de su Alma Máter. Se trata de la construcción de sólidos vínculos de relación con las comunidades, empresarios, egresados, organizaciones de todo tipo, para que la universidad cumpla eficazmente su rol, en el ámbito de su territorialidad, ser factor determinante para el progreso de la sociedad.
De esta forma, la sociedad se interesará para que esta institución mejore constantemente su calidad, innove sus procesos, productos y servicios, cumpla a cabalidad con su responsabilidad social, constituyéndose en corazón palpitante e impulsor para su desarrollo. Así dejaremos atrás a la universidad profesionalizante para transformarla en la institución que gestiona el conocimiento, orientada a la formación de un capital intelectual de alta calificación, con valores, ética y vocación de servicio, cuyo desempeño logre un elevado sentido de pertinencia, relevancia y trascendencia en favor del pueblo, la región y el país. Ese es nuestro regalo para LUZ en estos 125 años de su fundación y 71 de su reapertura.
