Trump, la nueva era de gobierno en EE.UU.
La era republicana inicia este viernes en la Casa Blanca. El mandatario número 45 de Estados Unidos, Donald Trump, asume la presidencia a las 12H00 en Washington D. C. (1:00 p.m. en Venezuela).
“Se hará con los mismos elementos protocolares que hemos visto históricamente cada cuatro años. Habrá una caravana que llevará al presidente Trump y su vicepresidente, Mike Pence, al Capitolio. Típicamente a esta ceremonia no son invitados jefes de Estado de otros países”, manifiesta Brian Straight, agregado de prensa de la Embajada de EE. UU. en Venezuela.
Trump, de 70 años, quien ganó la presidencia el 8 de noviembre de 2016, dará su primer discurso frente a miembros del Congreso, la Corte Suprema, Gobernadores y Alcaldes. Jimmy Carter, George W. Bush y Bill Clinton y su esposa Hillary Clinton, confirmaron su presencia.
“Este viaje comienza y voy a trabajar y luchar muy duro para que esto sea un gran viaje también para los estadounidenses. Juntos devolveremos la grandeza a Estados Unidos”, escribió el jueves Trump, en su cuenta en Twitter, antes de dejar su residencia en Nueva York.
A la ceremonia no acudirán, al menos, 53 congresistas demócratas, lo que representa una cuarta parte de la bancada de ese partido, en señal de protestas por las declaraciones de Trump contra el congresista John Lewis, uno de los íconos de la lucha por los derechos de los negros en Estados Unidos.
Se prevé que al tiempo que se realice la investidura presidencial, el descontento popular se haga presente. El jueves, se conoció que inmigrantes, mujeres y afrodescendientes manifestarán durante el traspaso presidencial.
Mandato impopular
El líder del partido republicano, que le ganó la carrera presidencial a la demócrata Hillary Clinton, asumirá la Casa Blanca marcado por la polémica. Durante su campaña presidencial y posterior a esta ha sido acusado de acoso sexual y xenofobia. Sin embargo, a todas las críticas ha sido inmune.
“Parece guiarse por la vieja máxima de perseguir que se hable de él, aunque sea mal”, publica la revista JotDown.
Trump, quien estará en la presidencia hasta 2020, es considerado como el presidente más impopular durante las últimas dos décadas. En noviembre de 2016, cuando ganó, las encuestas revelaban que 44 % de los estadounidenses aprobaban su conducta, una cifra muy por debajo de lo registrado en períodos anteriores por Barack Obama (83 %), George W. Bush (61 %) y Bill Clinton (68 %).
Humberto Amado Cupello, director de la facultad de Ciencias Políticas de la URU, manifiesta que el rechazo hacia Trump es “originario”. “Él ganó con una mayoría que casi es minoría. De hecho, en el voto popular ganó Clinton”.
Amado define a Trump como un hombre que se sale del perfil de lo que es un político tradicional. “No sabemos si en su gobierno va a prevalecer la línea gruesa de la política norteamericana o su liderazgo personal”.
Discurso agresivo
Pese a que el republicano ha sumado adversarios por sus declaraciones políticamente incorrectas, el mismo verbo mordaz lo llevó a la presidencia. Sus fuertes críticas contra los inmigrantes ilegales lograron que los electores conservadores le acortaran el camino.
Amado refiere que tratar de descifrar el nuevo gobierno es una gran incertidumbre por la personalidad de Trump. “Se han encontrado muchas lagunas, zonas grises que ha dejado a la libre interpretación”, manifiesta.
Pero la actitud que caracteriza al electo mandatario se contrapone a las últimas decisiones con respeto al nombramiento de su equipo de gobierno. “Él ha nombrado a funcionarios que forman parte del ala más conservadora del partido republicano, que tienen muy claro lo que es la función política y los cargos públicos”.
“También ha hecho unas propuestas muy interesantes de llevar nuevamente a suelo estadounidense las empresas que pretenden invertir fuera y eso es positivo para la economía”, resalta.
Mirada hacia el futuro
Straight, en comunicación con Versión Final, se mantuvo reservado sobre cuáles son los retos y desafíos de Trump en el tema político y económico porque “esa información le corresponde a los voceros de la Casa Blanca”. Sin embargo asevera: “Una de las tareas inmediatas para el Presidente electo será el nombramiento de 4.100 funcionarios federales para que inicie el mandato”.
Para Luis Angarita, internacionalista y docente de la UCV, el mandatario entrante se alejará de la gerencia de Obama. “Trump ha criticado abiertamente la participación de Estados Unidos en el conflicto sirio, el tema de Irak, el acercamiento a Cuba, la OTAN, el tratado de Libre Comercio y el gasto público interno en los programas implementados por Barack”. Augura que, probablemente, se acerque más a lo que fue la administración de George Bush, también republicano, “que echó a América Latina al olvido. En el caso de Venezuela va a debilitar las políticas de Obama y no le va a prestar atención al conflicto interno de nuestro país”.
