Presidente indonesio exige tolerancia tras ataque de musulmán en iglesia
El presidente de Indonesia, Joko Widodo, condenó hoy el ataque de un hombre musulmán con arma blanca en una iglesia católica en la provincia de Yogyakarta, en la isla de Java, y abogó por la tolerancia religiosa en el país con mayor población musulmana del mundo.
"Nuestra Constitución garantiza la libertad de religión. Por lo tanto, la gente que lleva a cabo o propaga la intolerancia no tiene cabida en nuestro país", dijo Widodo a los medios tras un discurso en el ministerio de Asuntos Exteriores.
El mandatario indonesio añadió que, aunque "casi todos los países sufren estos actos", ha ordenado a las fuerzas del orden actuar con decisión para garantizar el cumplimiento de la carta magna.
Decenas de feligreses abandonaron la iglesia durante la misa del domingo en la localidad de Sleman cuando el agresor entró en el edificio blandiendo una espada de un metro de longitud y persiguiendo a un hombre que sangraba por la cabeza.
El agresor, de 22 años, dañó varias imágenes católicas e hirió a cuatro personas, incluido el párroco de origen alemán de la congregación de Saint Lidwina y a un policía, antes de ser reducido por las autoridades mediante un disparo en la pierna.
La familia del atacante dijo al medio local Detik que este indicó en una conversación telefónica antes del incidente que "quería casarse con un ángel", una referencia a la recompensa en el paraíso por llevar a cabo la yihad o guerra santa.
Los heridos y el agresor fueron llevados a diferentes hospitales en la región.
En noviembre la policía mató a dos yihadistas que intentaron quemar una comisaría y que atacaron con arma blanca y una ballesta a los agentes de una comisaría en la isla de Sumatra, en el oeste del archipiélago.
Indonesia, donde la población musulmana representa cerca del 88 % de los 260 millones de habitantes, ha sufrido varios atentados islamistas, entre ellos el perpetrado en la turística isla de Bali en 2002, que causó 202 muertos.
