El diario plural del Zulia

Parlamento italiano, sin mayoría, elige a sus presidentes

Ningún acuerdo previo fue alcanzado entre los partidos políticos para señalar a candidatos oficiales

Las dos cámaras del Parlamento italiano, sin mayoría absoluta tras las elecciones del 4 de marzo, se reúnen desde este viernes para elegir a su presidente en unas primeras negociaciones políticas marcadas por la incertidumbre sobre el futuro gobierno.

Tras unas elecciones que dejaron en cabeza a la coalición de derechas liderada por la xenófoba Liga Norte, con el 37% de votos, y a la formación antisistema Movimiento 5 Estrellas con el 33%, el parlamento celebró este viernes su primera sesión para elegir a los presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado.

Ningún acuerdo previo fue alcanzado entre los partidos políticos para señalar a candidatos oficiales.

Se trata de dos cargos institucionales muy importantes en Italia, que además deben garantizar el equilibrio y el funcionamiento del parlamento, como prevé la constitución.

En la Cámara de Diputados las votaciones continuarán hasta que un candidato obtenga la mayoría absoluta, probablemente la próxima semana.

La coalición de derecha cuenta con 260 diputados y el M5E con 229. La mayoría absoluta es de 316 escaños.

Para la segunda y tercera votación se necesita una mayoría de dos tercios. A partir de la cuarta, será suficiente la mayoría absoluta.

En el Senado, la coalición de derechas cuenta con 135 senadores y el M5E con 112, mientras la mayoría es de 161 incluido los votos de los senadores vitalicios.

"El 4 de marzo nació un parlamento compuesto por sólo minorías", sentenció el diario Il Corriere della Sera, al apelar a las fuerzas políticas a "impregnarse de humildad política" para salir del punto muerto en que se encuentran.

El parlamento más joven de la historia de Italia, que representa sin duda a las nuevas generaciones, con un tercio de escaños ocupados por mujeres, es también el más inexperto, señalan los analistas.

Las negociaciones para designar a los presidentes de las cámaras son un primer examen, una suerte de entrenamiento, previo al momento decisivo de formación de un nuevo gobierno.

Tanto los indignados del M5E y como el líder de la coalición de derechas ahora liderada por el xenófobo Matteo Salvini, en vez del multimillonario y ex primer ministro Silvio Berlusconi, dicen estar dispuestos a dialogar con todos sobre la base de un programa específico.

El Presidente de la República, Sergio Mattarella, verdadero árbitro de la situación, deberá comenzar las consultas a principios de abril para designar al futuro primer ministro.

Mientras tanto el gobierno saliente liderado por Paolo Gentiloni (centro-izquierda) administra los asuntos corrientes.

- Voto secreto -

Como el voto es secreto no se descartan sorpresas ya que algunos parlamentarios podrían modificar la orden dada por el propio partido y cambiar los equilibrios, una costumbre muy italiana.

Muchos interrogantes suscita el grupo de debutantes parlamentarios del M5E, con un promedio de 38,5 años para los diputados y 50,6 años para los senadores, quienes no conocen el complejo sistema interno.

La mayoría de esos indignados ingresó a Montecitorio, el céntrico palacio de la Cámara de Diputados, vestidos con traje completo y corbata, en una suerte de mensaje al país de su voluntad de convertirse en fuerza de gobierno.

Pero la batalla será dura en todos los frentes. Lo que sí resulta claro es que ni el centroizquierda ni los indignados del M5E quieren contribuir a la resurrección de Berlusconi, líder de Forza Italia (FI), aliado clave de la Liga di Salvini.

Inhabilitado para formar parte del parlamento tras una condena por fraude fiscal, Il Cavaliere (14% de los votos) divide y a la vez exige que su ex ministro de Desarrollo Económico, Paolo Romani, sea el candidato de la derecha a la presidencia del Senado.

"No vamos a votar a gente con temas pendientes con la justicia", explicó Luigi Di Maio, el joven líder del M5E, refiriéndose a la condena a 16 meses con condicional de Romani por haber autorizado en 2011 a la hija de 15 años de usar el móvil oficial con el que llegó a gastar 12.000 euros.

Un mensaje más del cambio generacional que el nuevo Parlamento quiere alcanzar.

Lea también
Comentarios
Cargando...