El diario plural del Zulia

Niños, blanco de los abusos sexuales en Colombia

No hay inspiración cuando se escribe de la muerte, de la infancia que muere; menos, si es provocada por otras manos. Menos si los responsables son adultos. Familiares, amigos cercanos, lideran las listas de los responsables de las muertes infantiles en el país. Los niños en Colombia pierden su vida en manos de quienes deberían ser sus protectores, y esto, sólo esto, ya suena atroz.

La historia que arropa a miles de infantes, se pierde de vista cuando se habla de los atentados mortales en contra de las mujeres. Muchas de estas tragedias, asesinatos a mujeres y niños ocurren en el mismo contexto, madre e hijos.

Se conoció que en los primeros cinco meses del año, unas 204 féminas han sido asesinadas a manos de quien le prometió “amor”, sus parejas.

Aproximadamente cuatro casos, de los casos que ahora conmueven a todo un país, tendrían además un aviso, pues esas mujeres habían alertado a las autoridades, pero el silencio fue el detonante, la muerte la respuesta.

Barbarie, sólo así se pueden definir los asesinatos de los niños, en diferentes puntos del país. Fueron torturados, y violados antes de asesinarlos.

A Sara Salazar, la violaron, la torturaron y asesinaron. Tenía sólo tres años de edad, cuatro menos que la pequeña Yuliana Samboní. Ambas perdieron la vida en las mismas condiciones, y hasta se conoció que en este atroz crimen hay varios involucrados.

El hecho conmocionó al departamento del Tolima, Armero Guayabal, quienes salieron a exigir cárcel para los responsables de la muerte de la menor, que estaba bajo el cuido de sus padrinos, pues según el testimonio de su madre biológica, (de la que se desconoce el nombre), la entregó porque no tenía cómo alimentarla.

Las autoridades encargadas del caso informaron que la pequeña llegó con varios signos de tortura, y en estado de desnutrición, lo que deja en evidencia que fueron días de dolor para la infante.

Posición a favor

El secretario de Gobierno del Tolima, Ricardo Orozco, dijo por su parte que “al parecer hay negligencia por parte de la comisaría de familia del municipio Armero Guayabal”.

Así mismo, la directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Cristina Plaza se pronunció a favor de los infantes víctimas.

La directiva indicó que tan sólo el año pasado los casos de abuso sexual llegaron a los 11 mil, lo que “demuestra el grado de enfermedad que existe en la sociedad colombiana”. Por ello, insistió en que en el país se apruebe la cadena perpetua para violadores de niños ya que “estas personas no deben estar en la calle sino en la cárcel”.

Además hizo un llamado a los jueces del país para que no avalen beneficios penales para los abusadores de niños, “como lo contempla el Código de Infancia y Adolescencia, cero beneficios de casa por cárcel o que terminen sus condenas fuera de la cárcel”.

Además, se conoció, desde la posición que fijaron las autoridades a una emisora radial del país, que la menor había sido ingresada en varias ocasiones a centros hospitalarios. “Evidenciamos que la niña en 2016 había ingresado dos veces al hospital. Dijeron que posiblemente estaba perdiendo la nariz, al parecer por Leishmaniasis, no tenía la nariz”, explicó la secretaria de Salud de Tolima, Sandra Liliana Torres.

Víctima prematura

Hay varias aristas que podrían definir a un violador, una de ellas es el perfil que pueda tener la víctima, como su cuerpo, su forma de ser, su cercanía, incluso; pero cuando se trata de un bebé, cuando el blanco del agresor es un menor que no tiene ni el perfil, ni las habilidades para ser su víctima, conmociona, espanta, y repugna.

Ese es el caso de Camilo Andrés Martínez Cárdenas, de 19 años, soldado capturado por violar a una bebé de cuatro meses en Fuente de Oro, Meta.

Martínez era un conocido de la familia de la bebé. El pasado sábado llegó a la vivienda a pasar unos días de permiso que le dieron en el batallón y cuando la madre de la menor salió a hacer una diligencia el hombre aprovechó para abusar de la recién nacida, siendo sorprendido pocos minutos después del hecho por la progenitora, quien observó las lesiones en la niña y rastros de sangre en la ropa interior que el joven tenía puesta.

El capturado está a la espera de que se determine en qué fecha se le dictará sentencia y cuántos años pagará de cárcel.

Infancia enterrada

Wepe y Sek Rivera Parra, de 9 y 8 años de edad respectivamente, fueron encontrados sin vida. Las autoridades informaron que el padre, Jhon Albert Rivera Ramírez, había discutido con su madre la noche anterior, y los había dejado abandonados en el sector de Río Sucio, límite de las dos localidades del oriente caucano.

A estas historias se le suma una pequeña de 15 años de edad, quien fue asesinada en una vivienda del barrio Aranjuez, ubicado al nororiente de Medellín. Al parecer, el homicidio lo cometió el excompañero sentimental de la hermana de la víctima.

Mujeres, el blanco

La mujer colombiana es el punto débil de los hombres. Sus parejas, que primero juran amor eterno, compresión, solidaridad, y respeto, se toman a pecho la frase católica “hasta que la muerte los separe”, incluso, muchas veces, el matrimonio no es símbolo de la unión en pareja, muchas de las mujeres en el país, conviven con sus parejas sin contraer matrimonio, y es ahí, en la convivencia, donde terminan perdiendo la vida. ¿El responsable? Los celos enfermizos de los compañeros sentimentales.

Los números señalan que entre 2014 y 2016, 135 mil mujeres han sido víctimas de la violencia física, mortal por parte de sus parejas. En números, si se pudieran reunir, estas mujeres ocuparían la población de Riohacha o Yopal.

Los expertos invitados a un programa de televisión nacional apuntaron que los hombres con esta enfermedad denominada Celotipia, perciben el mundo como una amenaza, creen que ese “tercero” es una amenaza, y llegan al punto de matar, para “aliviar” sus celos.

Edith Jhoana Parra León, fue asesinada por su exesposo el pasado sábado. Sus dos hijas, fueron encontradas sin vida también, en una zona rural de la vereda La Arboleda del municipio de Inzá.

Este 23 de abril, una mujer y sus dos hijos menores de edad fueron hallados muertos dentro de una vivienda en el barrio El Pesebre, de Medellín, al parecer por su compañero sentimental

Hasta ahora las acciones siguen en espera, lo que sí se conoce es que las instituciones a favor de la mujer, la infancia y la adolescencia, piden cadena perpetua para los abusadores. ¿Se cumplirá?.

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