Marina Silva anuncia su precandidatura para las elecciones de Brasil en 2018
La líder ecologista Marina Silva, la tercera opción más votada en las dos últimas elecciones de Brasil, anunció su precandidatura para participar en los comicios presidenciales que se celebrarán en octubre de 2018.
En un encuentro celebrado en Brasilia, la principal dirigente del partido Red Sustentabilidad confirmó su disposición para disputar por tercera vez la Presidencia brasileña, aunque su candidatura aún tiene que ser aprobada en el congreso nacional de la formación, previsto para abril de 2018.
"Obviamente que no estaríamos aquí para decir que no. El compromiso, el sentido de responsabilidad, sin querer ser la dueña de la verdad, me convoca para este momento", afirmó Silva, quien fue ministra de Medioambiente en el Gobierno de Luiz Inácio Lula Da Silva.
La también exsenadora recibió en el encuentro los resultados de las conferencias estatales, celebrados durante los dos últimos fines de semana, los cuales promovieron su nombre para concurrir a los comicios de 2018.
La ahora precandidata criticó las reformas de corte liberal impulsadas por el Gobierno del presidente Michel Temer, en el poder desde el año pasado, y dijo que el país necesita de otras medidas diferentes porque la recuperación económica todavía es lenta.
"Un Gobierno con un 3 % de aprobación no tiene como construir reformas importantes, hasta porque las reformas importantes (que necesita el país) no son esas", apuntó en Brasilia.
Silva defendió su proyecto ante sus compañeros de partidos y manifestó que "el mejor regalo que la sociedad pueda dar a los partidos que crearon la crisis es un sabático de cuatro años".
La líder ecologista obtuvo en las elecciones de 2010 algo más del 19 % de los votos y cuatro años después elevó ese porcentaje hasta cerca del 22 %.
En las dos citas electorales quedó en tercera posición y no pudo acceder a la segunda vuelta, que ambos casos terminó ganando Dilma Rousseff, destituida el año pasado por el Congreso por supuestas irregularidades en el manejo de los presupuestos.
Una reciente encuesta realizada por el instituto Ibope le da a Silva un nuevo tercer lugar, por detrás del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y el diputado ultraconservador Jair Bolsonaro.
Al igual que Lula, condenado en primera instancia a nueve años y medio de prisión por supuesta corrupción pasiva y lavado de dinero, Silva también está acechada por la sombra de la corrupción después de ser citada en la vasta trama corrupta destapada en el seno de la petrolera estatal Petrobras.
