Jóvenes en huelga de hambre en sur Afganistán para pedir el fin de la guerra
Alrededor de una treintena de jóvenes mantienen una huelga de hambre desde el jueves en Lashkargah, capital de la convulsa provincia Helmand del sur de Afganistán, en una insólita protesta para exigir el final del conflicto armado que mantiene hundido al país en la violencia desde 2001.
"Algunos de nuestros huelguistas han caído inconscientes, pero todavía 30 continúan la protesta con la única demanda de paz y estabilidad", indicó a Efe Sifat Sarwan uno de los huelguistas y organizadores de la medida de fuerza.
La protesta comenzó el pasado jueves en medio de un movimiento espontáneo de respuesta ciudadana que ha surgido en Lashkargah después de que el pasado 23 de marzo 13 personas murieran y 15 resultaran heridas en un atentado talibán en esa ciudad.
Al día siguiente, el sábado 24, un grupo de familiares de las víctimas con apoyo de jóvenes de la ciudad comenzaron a movilizarse y a hacer una sentada exigiendo el final de la guerra.
El martes un grupo de chicas se unió a la protesta y anunció que enviarían una caravana para hablar con los talibanes, grupo insurgente que tiene una fuerte presencia en esta provincia.
Para ello pidieron un cese el fuego, pero como su demanda fue ignorada el jueves decidieron cambiar la sentada por una huelga de hambre.
"Hace dos días oficiales de alto rango de seguridad en la provincia visitaron el campamento (de la protesta) y manifestaron su disposición a hablar con los talibanes en cualquier lugar de la provincia sin precondiciones", dijo sin identificar a los jefe militares.
"Pero los talibanes todavía no han respondido positivamente a nuestra demanda", señaló, al manifestar que los insurgentes han emitido un comunicado en el que no han hecho una sola mención a la paz ni a la tregua.
Khadim otro de los jóvenes que secundan la protesta indicó a Efe que "algunos de los participantes en la huelga han caído inconscientes y han sido hospitalizados".
En total dos fueron hospitalizados ayer y cinco hoy, aunque su salud no corre peligro, dijo.
"Estamos haciendo esfuerzos para poder terminar la huelga de hambre con la mediación de gente local de la provincia", añadió.
Su objetivo es poner final a la violencia que mata a gente inocente, señaló.
Afganistán atraviesa uno de sus momentos de mayor violencia tras el final en 2105 de la misión militar de la OTAN, que continúa en el país en misión de asistencia y capacitación.
De acuerdo con la misión de Asistencia de Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA), 3.438 civiles perdieron la vida y 7.015 resultaron heridos durante 2017 como consecuencia del conflicto afgano.
El Gobierno afgano presentó en febrero una propuesta de paz a los talibanes para acabar con el conflicto que mantiene sumido al país en la violencia desde la invasión de Estados Unidos en 2001, sin que el grupo insurgente haya respondido hasta el momento.
