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Cuba dice que no renunciará al socialismo pese a las sanciones de EE.UU.

Estados Unidos anunció la semana pasada una nueva tanda de sanciones contra Cuba, Venezuela y Nicaragua, gobiernos a los que se ha referido como “la ‘troika’ de la tiranía”

El ministro de Asuntos Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, rechazó una vez más las sanciones impuestas por Estados Unidos y advirtió de que Cuba no renunciara al socialismo, al mismo tiempo que hizo un llamado a la población de la isla para construir un “orden internacional justo y equitativo”.

“Cuba siempre defenderá su soberanía e independencia y la decisión de su pueblo de construir el socialismo, y persistirá en la necesaria batalla por un orden internacional justo y equitativo. Un mundo mejor no solo es posible, sino que es indispensable e inevitable”, reiteró Rodríguez a través de su cuenta en la red social Twitter.

Destacó que Cuba “defiende su revolución con la certeza de que el imperialismo será derrotado“. El ministro cubano hizo estas declaraciones varios días después de que el asesor de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Bolton, anunciase una nueva tanda de sanciones contra Cuba, Venezuela y Nicaragua, gobiernos a los que se ha referido como “la ‘troika’ de la tiranía”.

Bolton informó este miércoles de que se incluirán cinco nombres relacionados en el aparato militar y de Inteligencia, así como la empresa estatal Aerogaviota, a la lista de sancionados.

Además, los viajes a la isla caribeña se limitarán exclusivamente a las visitas familiares, las remesas se restringirán a un máxima de mil dólares por persona cada tres meses, y se pondrá fin a las transacciones bancarias que usando un tercer país servían para mover el dinero de Cuba a Estados Unidos.

El anuncio de Bolton se produjo horas después de que el secretario de Estado, Mike Pompeo, informara de que a partir del 2 de mayo los tribunales estadounidenses admitirán las demandas contra empresas de todo el mundo que hagan negocio con los bienes confiscados por las autoridades cubanas tras la Revolución de 1959.

El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, condenó la decisión de Estados Unidos sobre la ley Helms-Burton y resaltó que “el título III no es peor que el I ni el II, que están en la cartera de acciones contra todo el pueblo de Cuba”.

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