El diario plural del Zulia

Noche de carcajadas en el Maruma

Maracaibo vivió una noche colmada de risas con el espectáculo Humor y vida, que se realizó el pasado domingo a casa llena en el salón Mara del Hotel Crowne Plaza Maruma. Cientos de asistentes se rieron a carcajadas con el show ofrecido por los comediantes venezolanos "El Portu", "La Titi" y el maestro del humor "Er Conde del Guácharo".

El encuentro se realizó a beneficio de la fundación "Dile sí a la vida", que con el apoyo de la Clínica La Sagrada Familia realiza cirugías bariátricas a personas con obesidad mórbida, que no poseen recursos para someterse por cuenta propia a dicha operación. El evento estuvo animado por Leo Colina y Emma Lares, quienes desde el inicio prometieron una velada divertida.

"Er Conde" en Maracaibo

Con su inseparable sombrero y su característico humor, "Er Conde" puso a reír a los asistentes. Sus chistes de matrimonios y de la vida cotidiana, salpicados con un toque de humor político, se ganaron los aplausos de presentes.

En conversación con Versión Final, Benjamín Rausseo, quien da vida al personaje margariteño, hizo énfasis en lo importante que son este tipo de iniciativas para quienes requieren costosas operaciones.

Las risas comenzaron a escucharse más temprano, gracias a las ocurrencias de Héctor Vargas, "El Portu", quien se ganó los aplausos de los asistentes con divertidas historias de personajes de la comunidad portuguesa.

Breinel Zambrano llegó convertido en "La Titi", personaje que desarrolló dentro del programa televisivo Portada's y con el que se ha dado a conocer en el país. Acompañada por su banda, "La Titi" hizo lo suyo, sacando risas a granel a quienes disfrutaron y apoyaron el evento. Al final de su participación agradeció a la fundación y dijo que para él fue maravilloso ser parte del encuentro.

Beneficiados

Al final de la noche los verdaderos protagonistas subieron al escenario. A través de un sorteo realizado sobre la tarima, fueron seleccionados cuatro pacientes que se someterán a cirugía para iniciar, como tanto lo han anhelado, una nueva vida.

Los ganadores fueron Ángel Atencio con un peso de 157 kilos, Jesús Hidalgo, con 138, Linmar Urdaneta, con 163, y Héctor Saavedra, con 165.

Gabriella Guadagno, quien forma parte de la organización del evento, dijo que este año unas 200 personas con casos importantes de obesidad y de diabetes se inscribieron para optar por la cirugía.

“A pesar de la situación del país nos arriesgamos a hacer este evento. Sabemos que las grapas y el kit bariátrico tienen un costo aproximado de 5.000 dólares. Pensamos que era imposible y nos daba miedo arriesgarnos, sin embargo, hace unos cuatro meses el mismo Benjamín Rausseu se acercó a nosotros y nos dijo que quería hacer algo para ayudar a la fundación, luego se unieron los otros dos talentos”.

Explicó que hasta hace unas semanas la organización estuvo a punto de suspender el evento por falta de ventade taquilla, sin embargo, sucedió lo que Guadagno calificó como “un milagro”. “La semana pasada se comenzaron a vender más los boletos. Hasta hoy teníamos recaudadas solo dos cirugías, pero llegó una persona, quien pre ere no identificarse, con un cheque con un aporte para la tercera operación”.

Durante el desarrollo de la actividad recibieron una nueva donación por parte de doctor Luis Corty, de la empresa Innomeq, que hizo posible un cuarto kit quirúrgico. Se superó así la meta de tres intervenciones que estaban prevista este año.

Además de las operaciones, los cuatro ganadores también recibieron cada uno un kit de vitaminas de parte de Supply Vitamínicos y blanqueamiento dental y rediseño de sonrisa donados por el doctor Gustavo Nava.

Zoraya Uber de Rubio, presidenta de la fundación "Dile sí a la vida" se mostró emocionada con los resultados obtenidos. “Esta es una fundación de amor y de oportunidades para las personas que no tienen cómo costearse una cirugía bariátrica. Estamos para apoyar a quienes necesiten cambiar sus vidas". En 2016 se realizaron las primeras tres cirugías costeadas al 100 por ciento, y otras 16 con el apoyo de la Sagrada Familia y de los doctores que exoneraron sus honorarios.

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