Venezuela tiene por delante el desafío de mejorar nivel en los Juegos Olímpicos
Se puede decir que la delegación venezolana cumplió con las expectativas que se tenían depositadas en torno a su actuación en los Juegos Olímpicos de Río, que recién culminaron el domingo.
Para el Instituto Nacional del Deporte, la participación de Venezuela en Río 2016 “ha sido una de la mejores de su historia” por las tres medallas conquistadas, además de los nueve diplomas obtenidos por los 87 atletas criollos en Brasil.
Son varios los aspectos resaltantes respecto a esta actuación de Venezuela. La marca de metales es la máxima para una cita olímpica, igualando con Los Ángeles 1984, solo que en aquella oportunidad las tres fueron bronceadas. En Río, la plata de Yulimar Rojas en salto triple, junto a los dos bronces por parte de Yoel Finol y Stefany Hernández, en boxeo y BMX, respectivamente, “salvaron la patria” luego de una primera semana con decepcionantes resultados.
Mayor inversión
Sin embargo, el rendimiento de Venezuela respecto a otros países del continente sigue sin ser más que decoroso. La inversión del Gobierno venezolano continúa siendo insuficiente si pretende que los nuestros puedan pelear por mejores puestos dentro del medallero general, donde Venezuela ocupó el lugar 65 entre 206 países.
La inversión en el tramo final del ciclo olímpico, según cifras del ministro del Deporte Mervin Maldonado, fue de unos 34 millones de dólares, cifra que no cubrió a la totalidad de los atletas que participaron.
Los zulianos Alberth Bravo y Nercely Soto recibieron tarde el apoyo por parte del Ministerio de Deporte de cara a su participación en Río. El nadador Cristian Quintero criticó la falta de químicos en las piscinas venezolanos. “Me gustaría que en Venezuela haya los mismos niveles que hay en el exterior, que no hay que preocuparse si hay cloro en la piscina o no”, dijo, mientras que Erwin Maldonado, nadador de aguas abiertas, tuvo que vender su carro para completar su preparación. “Me duele y me entristece todo eso que viví”, comentó en su momento.
El titular de la cartera de deportes aseguró que el Gobierno evalúa a quiénes tienen reales posibilidades de ofrecer resultados y en base a ese análisis se busca amoldar la mejor preparación para ese atleta, junto a las mejores condiciones y entrenadores. Un caso exitoso de ese plan fue el de Yulimar en salto triple, mientras que en cuanto al equipo de esgrima encabezado por Rubén Limardo y Silvio Fernández, al igual que la natación, estuvo lejos del objetivo trazado.
Ejemplo de apuestas exitosas en lo monetario fueron Colombia y Gran Bretaña, que acaban de firmar sus mejores actuaciones en citas olímpicas debido a las notorias mejoras en la inversión al deporte. En 20 años, los colombianos pasaron de no sumar medallas (Atlanta 96’) a ocupar el lugar 23 en el medallero, con tres oros, dos plata y dos bronce, mientras que los británicos sumaron una dorada en el 96’ y hoy ocupan el puesto dos del medallero general, con 27.
Instalaciones y bases
Aparte, la infraestructura que acompaña la preparación de los atletas venezolanos sigue estando lejos de los recintos de primer nivel de otros países. Venezuela ni siquiera tiene un centro de alto rendimiento para el atleta. Desde allí se parte con desventaja, al igual que con la dotación científica que tienen los entrenadores venezolanos para analizar y potenciar el rendimiento del atleta criollo.
Otro aspecto para que Venezuela incremente su nivel competitivo en el futuro será la continuidad que se les de a jóvenes procesos como los de Yulimar, Yoel Finol o la garrochista, Robeilys Peinado. Allí es clave mantener el proceso desde las oficinas. Venezuela tuvo hasta cinco cambios de ministros de Deporte durante el último ciclo olímpico.
Además, la planificación de Juegos Estadales, Nacionales y Universitarios no genera mayor interés por parte del Estado. “El deporte venezolano puede crecer aún más y esto lo tomamos como un impulso”, aseguró Maldonado. “Aunque esta actuación nos llena de alegría, aún nos falta mucho por hacer”, reconoció.
