El resurgir de Jhoulys
Lo importante no es cómo se empieza, sino cómo se termina. Quizá la frase sea un cliché, pero se adapta completamente al notable rendimiento de Jhoulys Chacín esta temporada.
Chacín, nacido en Maracaibo, tuvo distintos problemas sobre el morrito en sus primeros 11 juegos de este año con los Padres de San Diego.
El derecho dejó efectividad de 5.77 en 57.2 entradas de labor, con 64 hits permitidos, 49 ponches y 20 boletos, además de registro de cuatro victorias e igual número de derrotas.
En ese período, a su slider, que se ha convertido en un lanzamiento secundario más efectivo, le batearon para .208, con slugging de .361, en 72 turnos. Ante la sinker le promediaron para .337 y cambio .368.
La historia cambió a partir de junio pasado. Desde es fecha, el zuliano pasó de ser uno de los serpentineros más bateados de todas las Mayores a ser uno de los más efectivos.
El marabino exhibe un promedio de carreras limpias recibidas de 2.77 en las últimas nueve presentaciones de la campaña, con 52 abanicados, en 61.2 tramos de labor.
El extraordinario repunte de Jhoulys le ha servido para alcanzar los 10 triunfos por primera desde 2013. Desde junio, el diestro posee la cuarta efectividad más baja de la Liga Nacional entre los abridores que alcanzado al menos 60 innings en ese período.
Este desempeño le ha valido el interés de varios equipos contendientes que necesitan reforzar sus rotaciones
antes de la fecha límites para cambios (31 de julio).
“Realmente no puedo pensar en eso”, dijo Chacín sobre los rumores de cambio. “Tienes que salir hacer lo tuyo, pase lo que pase, sólo quiero darle al equipo la oportunidad de ganar cada vez que me subo al montículo”.
Ajustes
¿Qué cambió en el diestro de un mes a otro? La eficiencia de sus pitcheos, partiendo de la slider como principal envío. Al envío “deslizante” del venezolano le ligan apenas para .133 en 75 chances ofensivos, ese éxito se debe a una variación en su velocidad que está utilizando, lo que le permite a la sinker ser más efectiva que antes, en este momento le batea apenas para .244, mientras que ante su cambio los rivales tienen average de .357.
“Estoy lanzando una slider un poco más lenta, sabiendo que puedo lanzar ese pitcheo más en la zona de strike”, aseguró el marabino a MLB.com. “A pesar de eso, cuando tengo dos strikes, la vuelvo a lanzar con más velocidad, para buscar más ponches”.
En esos 10 desafíos, Chacín ha lanzando en cada uno de esos encuentros al menos 5.0 innings de tres o menos carreras, lo que representa la tercera mejor seguidilla del 2017 en las Mayores. La racha del zuliano solo es superada por Max Scherzer (12) y Zack Godley (11).
Por mejorar
Si algo tiene que mejorar el derecho es su rendimiento fuera del Safeco Field. Cuando lanza como visitante su efectividad es de 7.35 en 49.0 episodios, con 64 hits permitidos, 44 ponches y 19 pasaportes, además de cuatro lauros en 10 encuentros. Mientras que en San Diego tiene un excelente promedio de carreras limpias recibidas es de 2.05 en 70.1 capítulos, con 57 abanicados y 24 bases por bolas.
“No quiero pensar en eso, pero tengo que tener la misma mentalidad cuando lanzo fuera de casa”, aseguró el pitcher. “Nunca había sido un problema para mí cuando no lanzaba como home club. Este año ha sido una locura, pero yo tengo una gran cantidad de temporadas y sé que puedo hacer los ajustes para mejorar”.
Tiene efectividad de 4.21 en 21 salidas. En líneas generales ha empezado a cumplir con su rol como as de la rotación de los Padres. Y aún puede ser más consistente.
