El Barça sigue invicto
Barcelona empató 2-2 con el Real Madrid en la 36ª jornada de la Liga española, ayer en el Camp Nou, para seguir invicto tras un Clásico, el último de Andrés Iniesta con la camiseta azulgrana, que el equipo catalán acabó con diez.
“Hay que felicitar al equipo por el esfuerzo y seguimos con nuestro reto de acabar la liga sin perder ningún partido”, dijo Iniesta. “Todos hemos dado un paso más para no perder el partido. Hemos celebrado el título de Liga y eso nos hace felices”.
Luis Suárez abrió el marcador con una volea (10’), antes de que Cristiano Ronaldo equilibrara rematando un balón en boca de gol (14’) y que Leo Messi volviera a adelantar al Barça (52’), para llegar al empate final con un tanto de Gareth Bale (72’), en un partido bronco por momentos.
El Barça tuvo que jugar toda la segunda parte con uno menos después que en el descuento de la primera parte, Sergio Roberto viera la roja directa por un manotazo a Marcelo (45+2) para indignación de un Camp Nou lleno, pero con pocos aficionados blancos.
El equipo azulgrana recibió después del partido el homenaje de su afición tras proclamarse el fin de semana pasado campeón de Liga con los jugadores bailando y saludando en el centro del campo, antes de dar una vuelta de honor, mientras que con el empate puede seguir soñando con acabar la temporada liguero invicto sumando ya 42 partidos oficiales imbatido en Liga, entre dos temporadas.
Accionar
El Barça salió con fuerza, presionando en los primeros minutos de la primera parte y tras un aviso de Luis Suárez que desvió Raphael Varane (3’) llegó el gol. El uruguayo aprovechó un centro desde la derecha de Sergi Roberto para enganchar una volea cruzada haciendo el 1-0 (10’).
El gol animó al Barça, pero entonces apareció Cristiano Ronaldo para rematar en boca de gol una dejada de cabeza de Karim Benzema (14’), aunque el gol le salió caro al luso, que acabó tocado del tobillo derecho al sufrir un encontronazo con Gerard Piqué.
Cristiano tendría que ser sustituido en el segundo tiempo por Marco Asensio, buscando no forzar con vistas a la próxima final de la Liga de Campeones contra el Liverpool el 26 de mayo.
El empate trajo los mejores momentos blancos, con Toni Kroos moviendo el balón para los visitantes, mientras Cristiano y Marcelo llevaban el peligro con sus rápidas internadas.
Tras el descanso, el Barcelona, buscando solidez, metió a Nelson Semedo por Coutinho y a Paulinho por Andrés Iniesta, que fue despedido con una gran ovación y el público puesto en pie en su último clásico con la camiseta azulgrana.
Messi resuelve
Pese a estar con uno menos, el Barcelona apostó por la velocidad, apareciendo Leo Messi para aprovechar un pase de Luis Suárez y soltar un disparo ajustado al palo derecho haciendo el 2-1 (52’).
Con el Barça muy valiente, Zidane también apostó por meter velocidad con la introducción de Lucas Vázquez por Nacho, buscando el gol.
Apareció entonces Gareth Bale para igualar el marcador con un disparo desde la media luna tras un pase de Asensio, que se coló por la escuadra de Ter Stegen (72’).
El empate animó a los blancos que empezaron a llegar más a la portería azulgrana y el partido acabó rompiéndose en los últimos minutos convertido en un intercambio de golpes, aunque el marcador ya no se movería.
