Temen lobby para politizar la Basílica de la Chinita
Monseñor Roberto Lückert, arzobispo de Coro y presidente de la Comisión Episcopal de Medios de Comunicación Social, reveló que existe un “proyecto” para convertir a la Basílica en patrimonio de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
En entrevista con Versión Final el padre Lückert declaró que se pretende “pedir” que la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá sea “cedida” a la GNB, con un capellán militar como párroco; hecho que, a criterio de Lückert, sería un “atropello y demerito al clero zuliano”.
El presbítero no detalló qué fuente divulgó este plan, que no ha sido anunciado de forma oficial por la jerarquía de la iglesia católica zuliana.
“Yo también soy como los periodistas; no puedo decir quién fue. Eso corrió en Maracaibo, fue un comentario que oí. Es una torpeza y una violencia contra el patrimonio regional de la Basílica de Chiquinquirá, que no es patrimonio de la Guardia Nacional; es patrimonio del Zulia”, expresó el arzobispo de la Diócesis de Coro.
En respuesta a la interrogante sobre quién sería el sacerdote ideal para estar al frente de los compromisos de la Basílica, Lückert comentó: “Hay muchos curas valientes, valerosos, trabajadores y apostólicos en el Zulia que pueden dirigir la Basílica, no hay por qué poner a un militar allí”.
Destacó que de tomarse esta medida “la gente lo va a rechazar porque la Basílica es patrimonio del Zulia”.
Fuentes internas del templo de María del Rosario de Chiquinquirá aclararon que tras la salida del padre Eleuterio Cuevas, no se ha nombrado a un nuevo párroco.
El pasado 8 de enero, Cuevas fue homenajeado y despedido por la feligresía chiquinquireña, en la que sería su última homilía como párroco de la morada de la patrona de todos los zulianos; luego de 15 años al frente de esta ocupación.
El arzobispo de Maracaibo, monseñor Ubaldo Santana aceptó la renuncia de Cuevas, aunque recordó su importante labor en la propagación de la fe a la Reina Morena en la región.
Eleuterio Cuevas expresó a principios de año que se retiraba “satisfecho” con su gestión y que se trasladará a La Concepción para atender a esta comunidad tan desasistida.
Aclaró que los sucesos del 18 de noviembre en la Basílica de Chiquinquirá, cuando a la alcaldesa Eveling Trejo de Rosales le fue negado el ingreso al templo, fueron sanados. “No hay ningún disgusto ni con el municipio ni con la Gobernación. Nos quedó el mal rato, pero ya lo superamos”, afirmó.
Monseñor Ángel Caraballo, quien anteriormente ocupaba el cargo de obispo auxiliar en la Diócesis de la ciudad, es el encargado de supervisar las obras del templo.
Mientras que los vicarios Engelbert Jackson y David Urdaneta son quienes actualmente ofician las eucaristías en la Basílica.
Se espera que monseñor Ubaldo Santana anuncie en las próximas semanas el nombre del nuevo párroco oficial de la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá.
