Solicitan suero antiofídico anti coral para adolescente de 17 años
Un joven de 17 años, recluido en el Hospital Clínico Universitario de Caracas, necesita de carácter de urgencia un suero antiofídico anti coral.
Leonel Peña ingresó al hospital presentando mordedura de serpiente coral (Micruros Dissoleuco) en la mano derecha. El hecho ocurrió cuando el infortunado la manipulaba en el patio de su residencia en Guatire, donde la encontró.
En medio de la emergencia fue llevado al hospital de Guatire, luego al hospital Doctor Domingo Luciani del Llanito y finalmente al hospital Clínico de Caracas, en estos centros de salud no contaban con el suero anti coral.
Al joven lo ingresaron a la sala de Trauma Shock por presentar dificultad para mover los músculos. Para su recuperación se necesita suero antiofídico anti coral que al momento los Bomberos del Distrito Capital no poseen.
El capitán Luis Contreras, de los Bomberos Marinos del INEA Maracaibo, recibe la novedad y de inmediato se trasladó hasta Caracas, llevando solo con dos dosis de suero anti coral, por instrucciones del capitán Isaac Jordán, capitán de Puerto INEA Maracaibo.
Contreras explica que para una mordedura de serpiente coral se necesita por lo menos 10 ampollas y cuando no se tienen se solicita la ayuda a través de los organismos de ayuda humanitaria.
“En Venezuela no se fabrican los sueros anti coral. Son importados de Brasil, Colombia, Costa Rica y México. Solo llegan al país mediante ayuda humanitaria cuando se presenta un caso”, explicó el capitán Contreras.
Aseguró que son muy costosos y una dosis completa de 20 ampollas oscila en unos mil dólares en el mercado.
