Sindicato de Corpoelec: 50% de los trabajadores han renunciado en el Zulia
Lo que era un secreto a voces, terminó por confirmarse. La Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) no está exenta de la renuncia de técnicos e ingenieros, quienes deciden migrar ahuyentados por la hiperinflación, escasez de alimentos y medicamentos, y el deterioro de los servicios públicos y privados.
Wilfredo Olano, coordinador del Sindicato Único de Trabajadores de la Industria Eléctrica Similares y Conexos del estado Zulia (Sutiescez), informó hoy que el 50 % de la nómina de Corpoelec dimitió de su puesto de trabajo para irse del país. El éxodo de personal se acentuó desde el año pasado.
“Éramos 4.700 trabajadores, estamos hablando de que solo quedan unos 2.350. Pedimos a las autoridades que den respuesta a la Convención Colectiva, a las necesidades y las calamidades que viven los trabajadores del sector eléctrico, porque esto va a aguantar la ida de tantos profesionales capacitados”.
Desde las afueras de la Planta Ramón Laguna, ubicada en la avenida 17 de Los Haticos, un grupo de empleados eléctricos del estado Zulia denunciaron las precarias condiciones bajo las cuales desempeñan sus labores y solicitan la mejora de los beneficios contractuales.
Los trabajadores exigen la dotación de uniformes, herramientas y repuestos, así como el incremento de la póliza de seguro de Hospitalización, Consulta y Maternidad (HCM) y del transporte para cumplir con las labores de inspección.
“Estamos dispuestos a trabajar, pero necesitamos que nos den los insumos y repuestos para poder cumplir con nuestras labores. Queremos una reunión con el Gobernador. No tenemos HCM, llegamos a la clínica y nos rechazan cuando mencionamos que vamos por el seguro de la empresa”, aseveró Elvis Acuña, trabajador con 20 años de antigüedad.
Olano indicó que la protesta realizada ayer por los trabajadores -convocada por la Federación de la Industria Eléctrica de Venezuela (Fetraelec)- no ocasionó las fallas eléctricas registradas, este lunes, en la entidad zuliana.
“Que no vengan a decir que los apagones ocurrieron por el paro. Nosotros garantizamos que los puestos estratégicos no queden solos durante las protestas”, puntualizó.
La empresa eléctrica enfrenta lo que podría catalogarse como la peor crisis de su historia. Equipos y transformadores dañados, plantas termoeléctricas funcionando a media máquina o en desuso, el cierre de oficinas para el pago del servicio o atender el reclamo de los usuarios, y la migración del personal capacitado para responder ante cualquier situación inesperada.
